La crisis de la industria del automóvil persiste y después de un 2021 horribilis, el comienzo de 2022, con el conflicto bélico de Ucrania iniciando su tercer mes de combates y la inflación situada en cotas desconocidas desde hace lustros, no augura nada bueno.
Las matriculaciones de turismos y todoterrenos en el primer trimestre del año suman un total de 164.399 unidades, según datos de la Asociación Española de Fabricantes de Automóviles y Camiones (ANFAC), lo que supone un descenso del 11,6% respecto al año anterior. Comparada con el primer trimestre de 2019, el último año ‘normal’, la caída del mercado llega al 48%.
Las cifras del mercado de comerciales ligeros (26.023) e industriales (6.554, incluidos autobuses) en los tres primeros meses del año tampoco resultan nada halagüeñas, con una caída del 29% en el primer caso y una subida del 6% en el segundo caso, que no compensa la situación general del mercado, dados los bajos volúmenes de venta del sector de industriales.
Raúl Morales, director de Comunicación de FACONAUTO (la patronal que integra las asociaciones de concesionarios oficiales de las marcas de turismos, vehículos industriales y maquinaria agrícola presentes en el mercado español), asegura que el trimestre ha resultado “peor de lo esperado”. Aunque advierte que parte del problema se debe a “la falta de oferta” y a que “los plazos de entrega de vehículos quedan lejos todavía de lo que nos gustaría”, no duda que, pese a que estas circunstancias son críticas, lo que más preocupa al sector es que “la demanda pueda fallar”, debido al “impacto de la guerra de Ucrania y una situación macroeconómica cada vez más deteriorada”.
El vaso medio lleno del ‘renting’
El sector del renting no es incólume a este descalabro generalizado. La Asociación Española de Renting de Vehículos (AER) publicó el 4 de abril los datos de las matriculaciones de vehículos registradas por las compañías de renting, al cierre del primer trimestre de 2022, que se cifran en 46.073 unidades, lo que supone una caída dos puntos menor que la del conjunto total de matriculaciones, situándose en el 9,66% sobre el mismo periodo de 2021, cuando se contabilizaron 50.999 vehículos.
Estas cifras no impiden que se pueda hablar de ciertos datos positivos en relación al renting, que reflejan algo que también es realidad: que es un negocio que cuando la tormenta perfecta escampe seguirá ofreciendo buenas perspectivas futuras. Por un lado, su peso en el total de las matriculaciones del mercado español es, en la actualidad, del 23,46%, con una ligera subida con respecto al mismo período del año 2021, en el que el peso del sector era del 21,95%. Por otra parte, el segmento de vehículos que más representación tiene en renting es el de derivados (se llama así a los vehículos con las mismas características de un turismo cuya finalidad es el transporte de mercancías, por lo que solo cuenta con una fila de asientos y no tiene ventanas en los laterales traseros, ocupando todo ese espacio como un enorme maletero), furgonetas y pick up (un tipo de camioneta empleada para el transporte de mercancías, que tiene en su parte trasera una zona de carga descubierta), donde el sector copa el 34,63% del mercado, frente al 29,36% que tenía a marzo de 2021. Finalmente, en marzo, el renting ha supuesto el 43,48% del conjunto del canal de empresa, mientras que en 2021 suponía el 37,88%. En el acumulado de los tres primeros meses del año, tiene un peso en este canal de empresa del 42,87%, frente al 35,06%, que se registraba a marzo de 2021.
José-Martín Castro Acebes, presidente de la AER, en su valoración de estos datos, ha afirmado que “el renting ha cerrado el primer trimestre del año 2022 con un retroceso de las matriculaciones del 9,66%, situación que no se producía desde el inicio de la pandemia, en 2020. Los acontecimientos extraordinarios originados por el nuevo contexto geopolítico explican esta situación imprevista. Consecuencia de lo anterior, hay muchas variables explicativas afectadas: cadena logística internacional, cadenas de producción, costes de las materias primas y costes de la energía, lo que se añade a la consabida crisis de los microchips. Localmente, hemos de sumar las consecuencias de nuestra huelga de transportes. Todas estas circunstancias son incrementales y operan impactando en las capacidades de los oferentes, pero también causan simultáneamente deterioro en la confianza y en la capacidad de compra de la demanda, incluyendo la más ocasional, como la turística. No obstante, el renting incrementa su peso en el mercado en 1,51 puntos porcentuales, sobre el mismo mes del año anterior, hasta alcanzar un peso del 23,46%. Lo mismo sucede en el canal de empresa, donde el renting representa el 42,87%, casi ocho puntos porcentuales más que en el primer trimestre de 2021”.
El mercado de segunda mano también cae
Frente a estas cifras negativas generalizadas no cabe ningún consuelo. El mercado de segunda mano también se precipita. La falta de oferta, el paro de los portavehículos y la escalada del precio de los carburantes han lastrado el mercado de usados en marzo, que ha caído por segundo mes consecutivo, situándose en las 170.595 unidades, un 7,1% menos que en el mismo mes de 2021.
El director de Comunicación de FACONAUTO, Raúl Morales, no duda en calificar el mes de marzo de “desastre en todos los sentidos”, y explica que tal calificativo es el más adecuado porque se ha visto reflejado en el mercado de segunda mano y ocasión, que es, tradicionalmente, “el que más aguanta el golpe”. Para Morales, los motivos se encuentran en “la ya alargada crisis de los microchips, a la que se le ha sumado este mes la huelga de transportes y la guerra en Ucrania, un cóctel que ha repercutido muy negativamente en las ventas”.
“Fruto de todos estos factores –concluye– , las transferencias en los vehículos más jóvenes han caído en picado y una vez más son los tramos de más edad los que más se han visto beneficiados, ahondando aún más en la antigüedad de nuestro parque”. Tal es así que, en un análisis por tramos de antigüedad, la mayor caída se registró en las ventas de modelos de entre uno y tres años, que se desplomaron un 42,9% hasta marzo, con un total de 26.614 unidades. Solo durante el mes de marzo, las operaciones con estos vehículos cayeron un 39,6%, hasta situarse en las 10.502 unidades vendidas.
El mercado de segunda mano continúa sosteniéndose con las ventas de vehículos de más de quince años, que concentra el 37,2% de las operaciones hasta marzo, alcanzando las 167.120 unidades en el primer trimestre. En el tercer mes del año, las operaciones con estos modelos tan antiguos crecieron un 6,6% y, con un total de 64.583 unidades, supusieron casi el 38% del mercado. Morales afirma que estas cifras “nos retroceden a los niveles de 2020 y acortan el crecimiento previsto para este año que todavía está lejos de alcanzar a los de los años previos a la crisis sanitaria”.
El segmento de motos
Los datos más positivos dentro de la industria del motor nos los proporciona el segmento de motos. Según ha hecho público la Asociación Nacional de Empresas del Sector Dos Ruedas (ANESDOR) –entidad que representa a más del 96% del mercado, incluidos fabricantes e importadores de ciclomotores, motocicletas, triciclos y cuadriciclos–, los datos de matriculaciones de motos y vehículos ligeros del primer trimestre del año muestran que se matricularon en total 44.990 unidades. Esto supone un alza del 16,5% respecto al mismo periodo de 2021.
Hay que destacar que estas cifras prolongan el buen año que fue 2021, cuyas ventas crecieron un 14% y superaron los niveles previos a la pandemia. La demanda de motocicletas y ciclomotores en España en 2021 fue notable. En total, el año pasado se vendieron 642.160 unidades, de las cuales 182.854 fueron nuevas y 459.306, de ocasión, según los datos recabados por ANESDOR. Entre las motos de ocasión, 371.135 fueron motocicletas y 88.171, ciclomotores. Ya en 2022, y tras unos meses de enero y febrero fulgurantes, sólo en marzo se ha producido un ligero retroceso del 4,1%. En este primer trimestre los vehículos ligeros eléctricos continúan afianzándose en el mercado y ya rozan el 10% de las matriculaciones totales (4.365 unidades y 9,7% de cuota).
José María Riaño, secretario general de ANESDOR ha explicado que “el sector de la moto se ha desligado de la tónica general de la automoción española en los últimos meses. En un entorno general complejo como el actual, es una muy buena noticia para nuestro sector que los ciudadanos apuesten por sus vehículos. Creemos que esta tendencia, en la que ganan peso los vehículos de menor tamaño, continuará en los próximos meses”.
Las motocicletas, el principal mercado del sector, han presentado en el trimestre un alza de 16,9%. En este mercado, el canal de empresas ha aumentado un 4,1%, el de particulares un 14,2%, y el de alquiler (rent-a-bike) un 187,5%. Los ciclomotores, por su parte, han mejorado los datos en un 10,1%; los triciclos en un 39,2%; los cuatriciclos ligeros en un 20,1%, y los cuatriciclos pesados en un 11,2%.