A principios de año LG mostraba en el CES de Las Vegas su tercera generación de paneles OLED, que se han incorporado en algunos modelos que se pueden encontrar en el mercado desde hace unos meses y que supondrán un buen regalo para toda la familia durante estas fiestas navideñas.
Su caballo de batalla es el LG OLED evo G1, un televisor 4K (con resolución de 3840 x 2160 puntos) que destaca por su capacidad para ofrecer negros puros. Esta característica hace también que los otros colores proporcionen mayor profundidad y las texturas puedan percibirse con un mayor detalle.
La clave está en los píxeles autoluminiscentes, una tecnología de pantalla que ofrece una diferencia notable respecto a la de retroiluminación que nos veníamos encontrando en los televisores LED. Sus millones de píxeles se pueden encender y apagar para conseguir un contraste difícil de superar.
Los LG OLED pueden mostrar el 100% del espectro DCI-P3 en un espacio de color 3D. Así, los colores se muestran vivos, con saturación total.
Todo esto redunda en un gran realismo de las imágenes. Intertek, la agencia de pruebas global, asegura que las pantallas LG OLED exhiben una fidelidad del color del 100%. Así, lo que se ve será más cercano aún a las tonalidades que se encuentran en el mundo real.
El panel OLED de tercera generación, que incorpora el modelo LG OLED evo G1, tiene un consumo menor respecto a los de segunda generación y ofrece mayor brillo. El fabricante ha rediseñado sus paneles y ahora albergan varias capas OLED adicionales de un material que mejora la calidad de imagen, refinando las longitudes de onda de la luz para aumentar la eficiencia.
El LG OLED evo G1, además, incluye el procesador Alpha 9 Gen 4, que está dotado de Inteligencia Artificial basado en deep learning para remapear y reescalar la imagen con todo detalle y precisión, optimizando el color y el contraste, mejorando la calidad de visionado.
Este televisor es compatible con los principales formatos de vídeo HDR como: HDR Dolby Vision IQ, HDR 10 Pro, HLG Pro, HDR Effect, HDR GiG. Otro aspecto curioso que incorpora es el Filmmaker Mode, de tal manera que ya no tendrás que preocuparte por los ajustes de imagen de tu TV. El Modo FILMMAKER ajusta automáticamente los parámetros de brillo, color y contraste entre otros, para disfrutar del cine como fue creado por el director. La calidad de sonido del G1 va en consonancia con la de imagen. Tiene sonido envolvente Dolby Atmos y procesador de sonido con inteligencia artificial AI Sound Pro. Su potencial total es de 60w con 4.2 ch.
Otro capítulo aparte merece su sistema operativo. La firma corena sigue apostando por webOS, que ya se encuentra en su sexta versión. Su simplicidad y opciones variadas, lo han consolidado como una buena plataforma para los Smart Tvs.
En la home del televisor se puede encontrar información sobre los distintos servicios a los que los usuarios se han suscrito. Lo bueno es que la inteligencia artificial que acompaña al LG OLED va aprendiendo poco a poco para mostrar cosas cada vez más relevantes y adaptadas a los gustos y costumbres de sus televidentes.
El televisor que enamorará a los gamers
Además de para ver películas o series, contemplar documentales o emocionarse con competiciones deportivas, este televisor es ideal para sacar el máximo partido al mundo del gaming. Los tiempos de respuesta que ofrece son muy cortos, de 0,001ms. Así, las imágenes en movimiento son totalmente fluidas, sin que se perciban borrosas. Obviamente, en esto también influye que la tasa de refresco sea de 120 Hz y un Input Lag de tan solo entre 8 y 12ms.
A ello hay que sumar que el televisor se acompaña de un modo de juegos dedicado para que no tengas que preocuparte de configurar nada. Basta con conectar una consola y la LG OLED evo G1 hace el resto. La tasa de refresco variable compatibles con (VRR HDMI2.1, nVidia GSync y Freesync), y el modo automático de baja latencia (ALLM) son otros pluses en este sentido.
La voz de su amo
El televisor viene con el nuevo mando Magic Remote, que incluye un puntero inalámbrico con sensor de movimiento integrado. Es una suerte de ‘ratón’ que puede facilitar las cosas a aquellas personas que no sean muy aficionadas a pulsar botones.
No obstante, el televisor también se puede controlar sin mando a través de órdenes de voz, para cambiar canales, entradas, variar el volumen, abrir aplicaciones o apagar la TV. Además, gracias a su compatibilidad con Alexa o Google Assistant, podrás controlar los dispositivos Inteligentes externos conectados a la WiFi de tu hogar. Con ThinQ también es posible acceder a todos los electrodomésticos conectados y domótica de LG.
Al tener un grosor tan reducido y un bisel fino, el televisor se puede acoplar perfectamente a una pared, ‘mimetizándose’ en ella casi como si fuera un cuadro o una elegante ventana panorámica. De hecho, esta es la configuración básica y aquellos usuarios que quieran usarlo con un soporte tendrán que comprar este accesorio por separado.
Las nuevas LG OLED evo G1 se pueden encontrar en formato de 55 pulgadas, 65 pulgadas y 77 pulgadas. Su precio de partida es de 1.999 euros.