La cadena japonesa de ropa y complementos Uniqlo, que pertenece al grupo Fast Retailing, es ahora dueña del número 37 de la Gran Vía de Madrid, que le ha servido como sello de marca en la capital desde su residencia iniciada en 2022. El edificio ha sido el protagonista de este traspaso de 85 millones de euros de las manos de Axa RE, la multinacional francesa de seguros, al grupo japonés, obteniendo una plusvalía de más de 5 millones en la operación, según el Economista.
La tienda de Uniqlo que se encuentra en este inmueble, ubicado en la icónica calle de la ciudad, consta de tener el mayor número de cajas autopago de España, con un total de 18, además de cinco cajas tradicionales. Asimismo, fue la primera en introducir dos servicios exclusivos en el país: UTme! y Repair Studio. La adquisición de este inmenso inmueble significa una ampliación de 1200 metros cuadrados distribuidos en tres plantas, y refuerza la presencia de la marca en la capital.
El fenómeno de la marca japonesa se extiende a tres tiendas en Madrid desde su llegada en 2019, una en la calle Goya y la otra, consistiendo en a más reciente la inaugurada el 27 de marzo, en los números 83-85 del paseo de la Castellana. En total en España, suma un total de siete tiendas. Las cuatro restantes se encuentran en Barcelona donde comenzó su expansión en 2017. A finales de 2024, Uniqlo ya operaba 76 tiendas en Europa y más de 2.500 en todo el mundo. Además, Fast Retailing es propietaria de GU, su marca de moda low cost, que se prepara para expandirse internacionalmente en los mismos mercados que Uniqlo.
La historia del número 37 de la Gran Vía
El inmueble goza de una rica historia arquitectónica y cultural. Fue construido entre 1927 y 1928 por el arquitecto José Miguel de la Quadra-Salcedo Arrieta-Mascarúa. Anteriormente, albergó los cines Avenida y también fue la sala de fiestas Pasapoga. En 2009, la firma sueca H&M lo ocupó para establecer su tienda insignia en Madrid.
A partir de 2014, Axa fue su propietaria tras su adquisición a través de la sociedad Pantalica Investments por 79,7 millones de euros, estableciendo un precio récord en el mercado inmobiliario madrileño de 20.000 euros por metro cuadrado. El edificio cuenta con una superficie total de 4.000 metros cuadrados, de los cuales unos 2.300 están destinados a uso comercial y se distribuyen en cuatro plantas.