Por segundo año consecutivo Louis Vuitton ha colaborado con el Gran Premio de Fórmula 1 de Mónaco. Lo hace con la creación del baúl en el que se transportó el trofeo del campeonato, entregado el día 29 de mayo al piloto ganador de la carrera, el joven Sergio Pérez.
Esta es sólo una de las muchas competiciones deportivas en las que la firma parisina tiene este honor. Otras son: la Copa Mundial de la FIFA, el trofeo Larry O’Brien de la NBA, el trofeo de League of Legends, la Copa del Mundo de Rugby de Francia de 2023, la Copa Davis, Roland Garros y la Copa América. Victorias que saben mejor cuando viajan en Louis Vuitton.
Para esta ocasión, el baúl fue fabricado de manera artesanal en el taller que la Maison tiene en Asnières, a las afueras de la capital francesa. Representa todo el savoir-faire de Louis Vuitton, mientras esboza la inspiración del legado del Gran Premio de Mónica de Fórmula 1, que celebra este año su 79ª edición.
Un baúl ganador
La emblemática lona Monogram está adornada con el tono rojo de la bandera del país anfitrión de la carrera. A su vez, las líneas rojas que trazan la ‘V’ de ‘Victoria’ van bordadas con una línea blanca que recuerda el singular trazado urbano de la vía.
Este baúl hecho a medida sostuvo el trofeo que más tarde le fue entregado a Sergio Pérez, el piloto ganador de esta carrera. El diseño elegido representa las 19 curvas del circuito de 3.337 kilómetros de recorrido.
La colaboración entre el Gran Premio de Mónaco y Louis Vuitton viene a confirmar la sólida relación entre las dos referencias. La casa de moda y las organizaciones monegascas comparten valores tan preciados como la historia, la tradición, la transmisión y la excelencia, que se reflejan año tras año en una de las carreras más legendarias de la Fórmula 1, celebrada a cargo del Automobile Club de Mónica (ACM) y el alto patrocinio del príncipe Alberto II.