La pandemia causada por el coronavirus ha puesto a la sociedad, los gobiernos y a la economía contra las cuerdas y, aunque acabe, los expertos aseguran ya que vendrán otras. Esta experiencia, consideran, tiene que servir como aprendizaje a muchos niveles, aunque el foco fundamental debe ponerse en la estructura del sistema sanitario y la importancia que tiene la investigación científica y la prevención para lograr que los efectos no sean tan devastadores como los que está teniendo la del covid-19.

“Desde mediados del siglo XX nos creíamos invulnerables a las enfermedades infecciosas, pero en realidad somos muy vulnerables. Pensábamos que habíamos vencido a todas las enfermedades sanitarias. En realidad, lo que teníamos es que habíamos logrado hacer vacunas”, afirma a Forbes Margarita del Val, inmunóloga y viróloga e investigadora científica del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC).

La experta se muestra convencida de que habrá nuevas pandemias y advierte: “El sistema sanitario tiene que estar preparado”. “Cada vez somos más capaces de propagar (las enfermedades)”, apunta haciendo referencia al avance de las comunicaciones y el movimiento de personas en un entorno globalizado. 

“Debemos volver a encontrar el hueco de las enfermedades infecciosas, tanto en prevención, uno de los temas más abandonados de nuestro sistema sanitario siendo básico ante este tipo de enfermedades que no conocen fronteras; como en investigación ligada a la salud pública, que no deja de ser otra manera de prevención”, añade. 

Esta apuesta por la prevención y la investigación requiere un sólido compromiso para reforzar el sistema sanitario y destinar más fondos a investigación. Esta es una de las llagas que presiona Del Val: España no invierte lo suficiente en investigación y, además, lleva años perdiendo talento.

“En España, la investigación se considera un gasto, un lujo. En cuanto hay crisis, se prescinde de los lujos”, sostiene señalando los recortes que se produjeron durante la crisis de 2009. “Desde entonces no se ha retomado el apoyo firme a la investigación”. 

Esa crisis es origen también de la sangrante pérdida de talento investigador español de la última década. Jóvenes que se marcharon a trabajar a otros países y no han vuelto porque las condiciones del mercado no lo permiten. “Hay una investigación de muy alta calidad en todas las áreas de conocimiento, pero poco a poco, en estos años hemos perdido a generaciones de investigadores que se marchan al extranjero tras formarse aquí y no pueden volver para enriquecer el tejido investigador, industrial y tecnológico”, subraya.

Pero Del Val no pierde la esperanza en que esta pandemia sirva para aprender al menos eso, que la investigación es un aliado clave a la hora de enfrentar situaciones tan complejas y dramáticas como esta crisis sanitaria en la que han perdido la vida casi 2,8 millones de personas en todo el mundo, 74.420 de ellas en España. 

Bajo su punto de vista, la crisis del covid puede servir para mostrar que la investigación ha sido clave en dos aspectos. Por un lado, para poner en valor la rápida reacción para enfrentar la pandemia y transmitir a la sociedad los avances alcanzados en todo el mundo y contribuir a mitigar la incertidumbre”. Por otro, en la capacidad que han demostrado los investigadores de todo tipo para desarrollar y producir kits de diagnóstico, de detección, la velocidad de análisis y, por supuesto, la vacuna. Estas dos últimas herramientas son, además, resultado de las técnicas de investigación básicas, destaca la viróloga del CSIC. 

Pero la defensa de la labor investigadora va más allá del ámbito sanitario y de esta crisis causada por el covid-19. Para Del Val, es fundamental “que aprendamos que hay muchos investigadores de todos los ámbitos de la ciencia que pueden aportar conocimientos de gran utilidad”. “No conocemos todo, pero conocemos mucho más de lo que conoce o sabe la sociedad”, apunta. 

Para aterrizar su argumento aborda otra emergencia a la que, quizá, no se le pone el músculo económico adecuado a pesar de estar en la agenda desde hace años: el cambio climático. Considera que no se pone en valor el aporte que se puede hacer desde la investigación, en diversos ámbitos, a los retos de la vida diaria: desde la reducción de la contaminación en las ciudades hasta la implementación de sistemas de transporte con energías renovables. 

“El cambio climático es un reto que ya está aquí y para el que valdría lo mismo que para las pandemias: prevención”

“El cambio climático es un reto que ya está aquí y para el que valdría lo mismo que para las pandemias: prevención”, remata. “Cuando haya pasado unos umbrales, nos costará muchísimo más esfuerzo económico y social, algo que ya hemos vivido, de lo que nos podría costar ahora que ya se nos hace cuesta arriba”. 

Las vacunas, respuesta a toda infección

Del Val es firme defensora del rol que juegan las vacunas en la lucha contra las enfermedades infecciosas. “Son la mejor respuesta a cualquier infección”, responde rotunda. Pero pone en negro sobre blanco su funcionamiento: “Hay vacunas de muchos tipos, algunas protegen solo de los síntomas más graves, otras incluo de los síntomas moderados y leves. Tenemos vacunas sobresalientes, pero las que se llevan la matrícula de honor son las que protegen de la infección y, por tanto protegerían del contagio. Son las conocidas como vacunas esterilizantes”.

La vacuna contra el covid-19 se logró desarrollar en nueve meses, un tiempo récord para un fármaco como este. En España, la campaña de vacunación comenzó el 27 de diciembre de 2020, hace ya tres meses. Desde entonces, según los datos del Ministerio de Sanidad, se han recibido 8,5 millones de dosis en total repartidas entre los fármacos de Pfizer, Moderna y AstraZeneca. En plena tercera ola, se han administrado más de 6,6 millones y ya están inmunizadas, es decir, han completado el ciclo de vacunación casi 2,3 millones de españoles.

Ninguna de las vacunas actuales “protege de la infección”, recuerda la viróloga. “Las personas vacunadas se pueden infectar. Esperamos que lleguen mejores vacunas, una solución mejor a la actual, que permita proteger a las personas, proteger a la sociedad del efecto tan tremendo sobre la economía y la sociedad que está teniendo la pandemia”. 

Los datos, clave para la gestión de la pandemia

Durante su intervención en uno de los paneles del Forbes Summit Healthcare 2021, Del Val señaló las dificultades para recopilar y acceder a datos sobre el avance de diversos aspectos de la pandemia. Una información fundamental para comprender qué está ocurriendo y tomar decisiones en consecuencia. La pandemia ha puesto sobre la mesa la importancia de apostar por la gestión de datos y extraer de ellos información relevante, acción que junto con la digitalización serán clave en el sistema sanitario poscovid. 

“El uso masivo de datos nos puede dar una información distinta, pero lo más importante es que los interprete y entienda un especialista”, ha señalado la viróloga. En este sentido, y respecto a la reacción que se ha producido ante la proliferación de variantes del coronavirus, ha opinado que no sirve “para nada secuenciar muchas variantes. Lo que vale es que las muestras sean representativas de la población”.