El español Carlos Sainz amplió el viernes su récord como ganador más veterano del Rally Dakar con su cuarta victoria en la categoría de coches –las anteriores se produjeron en 2010, 2018 y 2020–, y la primera de Audi, a los 61 años. Su hijo, el piloto de Fórmula 1 de Ferrari Carlos Sainz Jr. estuvo allí para abrazar a su padre cuando la carrera de dos semanas de duración llegó a la meta en Yanbu, en la costa saudí del Mar Rojo. El “Matador” y su copiloto, Lucas Cruz, terminaron la competición con una ventaja de una hora, 20 minutos y 25 segundos sobre la pareja formada por el piloto belga Guillaume de Mevius y el copiloto francés Xavier Panseri.
Sainz logró el triunfo por su regularidad y el dominio absoluto de la estrategia, ya que no necesitó ganar ninguna de las 12 etapas. Se permitió, incluso, minimizar riesgos cruzando la meta en 12ª posición en la etapa final del viernes en Yanbu, en la costa del Mar Rojo. Una circunstancia que añade aún más valor a la victoria de Carlos Sainz y su trayectoria en el Rally Dakar es que sus cuatro victorias –siempre acompañado por Lucas Cruz como copiloto– se han producido con diferentes fabricantes, tras los triunfos anteriores de Mini, Volkswagen y Peugeot. Sainz competía para Audi desde la edición de 2022 con un RS Q e-tron híbrido –que monta tres motores eléctricos –y casi 400 kilos de baterías– y un motor de combustión alimentado con un combustible sintético–, y esta ha sido la primera ocasión en que el fabricante alemán gana el Rally Dakar, precisamente el año en el que concluía su compromiso con el más famoso raid del mundo: Audi se centrará ahora en su aterrizaje en la Fórmula 1, en la que debutará en 2026.
Sólo el francés Stephane Peterhansel, ocho veces ganador en coches (y seis en motos), y el qatarí Nasser Al Attiyah, con cinco, han ganado más veces la carrera en coches, y Sainz queda ahora empatado a cuatro con el finlandés Ari Vatanen, ganador en 1987, 1989, 1990 y 1991.
Nada más aterrizar en Madrid, Sainz y Cruz se desplazaron al Audi Center Madrid Norte, el fabuloso concesionario que la firma tiene en la avenida de Burgos de Madrid, para atender a medio centenar de medios de comunicación y contar sus sensaciones sobre esta victoria. “El año pasado a estas alturas volvíamos del Dakar muy decepcionados, por el accidente y la lesión. Ha habido un año de por medio en el que lo primero que había que hacer era recuperarme de la lesión y analizar bien todo lo que había fallado y qué se podía hacer con respecto al año anterior”.
Sainz reconoce que 2023 ha sido “un año sido complicado” y reconoce que afrontaron “el Dakar, no voy a decir que con dudas, pero sí, quizá, con un pelín de preocupación. De hecho, el rally ha sido muy duro, quizá el que más, y la prueba la tenéis en que cada día era un drama por cómo les han ido las cosas a los ocho o diez pilotos que partían como favoritos. Afortunadamente, para nosotros ha terminado muy bien: era la última bala que teníamos para poder darle a Audi esta victoria, que aunque solo sea por la valentía de tratar de ganar el Dakar con este concepto de coche, se merecían. Yo tuve la suerte de ser el primer piloto en ganar un tramo del Dakar en nuestro primer año con Audi, en 2022, y ahora hemos tenido también la suerte de poder dedicarle a Audi está esta victoria, que es un hito en la competición, por el concepto tan especial de coche con el que competíamos, que según lo íbamos conociendo nos iba generando infinidad de dudas por su enorme complejidad tecnológica. Cuando al principio te lo explican como funciona todo parece claro, pero cuando empiezas a trabajar y ves todo lo que tiene descubres que es tremendamente complejo”.
Los periodistas de motor sabemos lo difícil que es correr en un circuito, en carretera o sobre hielo, pero ¿cuáles son las habilidades que hay que tener como piloto para triunfar en el Dakar?
Hay que ser muy polivalente. Hay que entender la carrera y este año había que aplicar más estrategia que en años anteriores, sobre todo en la famosa etapa especial de 48 horas. Ha habido que mezclar mucha velocidad y también mucha estrategia y en ese sentido también quiero dar las gracias a Lucas en especial, porque ha hecho un excelente trabajo y al final nos hemos traído los dos a casa nuestro cuarto tuareg que, repito, con este concepto de coche tan especial me hace mucha ilusión.
En el Dakar se conduce siempre a vista e improvisando al 100%. Salvo algún punto concreto, vas por donde ves y a veces la vista te juega malas pasadas: crees que puedes ir más rápido y de repente te aparece un bache. Hay que ir rápido, pero también lo suficientemente lento como para no destrozar el coche o pinchar en las zonas de trial. En años anteriores había pinchado alguna que otra vez, pero este año he perdido la cuenta: no sé si han sido quince o veinte veces. En la etapa de 48 horas hemos atravesado seiscientos kilómetros de dunas; el día que acabó esa etapa hubo un traslado en el que nos llevaron en avión y me quedé dormido, y me desperté sobresaltado con una pesadilla, ¡soñando que me caía en una duna! Muchas veces frenas más de lo que luego, cuando coronas la duna, te hubiese gustado frenar, pero basta que una ocasión no frenes lo suficiente para que te pase lo que me pasó el año pasado o te metas en la cresta de la siguiente duna y destroces toda la parte delantera del coche, como le ha pasado a Nasser Al Attiyah. Basta con que en las zonas de piedras te encuentres una piedra que pensabas que estaba un poco más a la derecha o a la izquierda para que rompas la suspensión.
Con su copiloto actual, con el coche de Audi actual y con su estado de forma actual… ¿no echa de menos competir en el Mundial de Rallies?
¡Nooo! Hace ya muchos años que me retiré del Mundial de Rallies. Fue mi vida, fue mi pasión, pero he tenido la suerte de poder reinventarme en una carrera tan especial como el Dakar en la que también he disfrutado y me he apasionado. Al final, para ganar tienes que disfrutar y este año nos hemos divertido y hemos disfrutado mucho. No sé si será la última o no, lo único seguro es que es la última con Audi. En otras ocasiones he pecado de impaciente y después de un día malo he querido hacer una machada, pero este año, como me ha dicho mi hijo Carlos [el piloto de Fórmula 1 en Ferrari], esta ha sido la vez que más inteligentemente he pilotado en el Dakar.
¿Volverá al Dakar el año que viene?
De momento, déjame disfrutar. Quiero disfrutar de esta victoria y ya pensaré en mi futuro en las próximas semanas.
