Intenso, perfumado, elegante, fresco, atractivo, vívido. Su rojo picota transporta el paladar del comensal a las frutas rojas con notas de frutas del bosque y negras que desprende su aroma. Sus toques ligeros a especias, su equilibrio. Su textura sedosa en el paladar con un final largo y elegante. Catar un buen vino es un auténtico placer y la nueva añada de Ysios ejemplifica cómo el mimo en el cuidado de su cosecha es sinónimo de una extraordinaria calidad que anima a explorar lo inesperado.
Pertenecer a la Denominación de Origen Rioja supone respetar una herencia legendaria reconocida y galardonada a nivel mundial. No obstante, las nuevas generaciones también traen nuevos retos al sector. Y desde Ysios tienen claro que pasado y futuro solo pueden tener un nexo común: el presente.
Por eso acaban de presentar Ysios Selección 2019, una nueva añada que promete sorprender a todos los paladares. De hecho, calificada como Excelente por el Consejo Regulador, la clasificación más alta en Rioja y la primera vez que se otorgaba desde 2011, esta apuesta por la marca vitícola se postula como una auténtica declaración de elegancia, modernidad y calidad premium. Pero ¿cómo lo han conseguido?
Esta nueva añada promete un perfil más afrutado, ligado a la nueva tendencia del mercado aupada por los nuevos wine lovers. Los consumidores de hoy buscan vinos ricos y afrutados, e Ysios Selección 2019 ofrece precisamente eso: una elección perfecta para paladares modernos que seguirá atrayendo a los más tradicionales.
Esta declaración de intenciones también trae consigo un nuevo diseño escenificado en una nueva botella alineada con la Gama Ysios. Lo hace adoptando el elegante estilo Borgoña, mejorando el atractivo visual del vino y acercando esta imagen premium a los altos estándares de la marca.
Su estética moderna y fresca es también vertebradora de la filosofía de la marca, porque Ysios Selección 2019 no es solo un vino, sino una experiencia más amplia y cohesiva que fortalece el reconocimiento y la lealtad a la marca.
En su interior, la representación del Tempranillo de Rioja Alavesa, procedente de diferentes parcelas distribuidas por los pueblos cercanos a la bodega. Todas con un cultivo en secano con más de 35 años que se reproducen en una cosecha reducida y de extraordinaria calidad. Las uvas de esta Selección fueron recogidas de forma manual y fermentadas de manera separada en distintos depósitos, a temperaturas controladas y seguidas por un envejecimiento mínimo de 12 meses en barricas de roble francés.
El resultado, una gama de vinos de máxima calidad que dan a los consumidores la bienvenida a lo inesperado. En definitiva, a la grandeza de unos tesoros escondidos entre viñedos de la Rioja Alavesa marcados por la herencia, esencia y vanguardia.
