Antes de 2018, muy poca gente había oído hablar de OnlyFans. Por aquel entonces era una web con dos años de vida lanzada por Tim Stokely, un empresario británico del sector de contenidos para adultos. Sus sitios anteriores -GlamGirls y Customs4U- no habían despegado. Pero tenía esperanzas puestas en OnlyFans, un mercado donde los creadores podían vender fotos y vídeos exclusivos a los usuarios. «Siempre pensamos: ‘¿Y si pudiéramos crear una plataforma exactamente igual o muy parecida a las que existen en las redes sociales, pero con la diferencia clave del botón de pago?», dijo Stokely en una entrevista de 2021 con la revista GQ.
Aunque el empresario afirma que el sitio nunca se comercializó para ninguna industria específica, pronto ganó tracción como un mercado de porno personalizado. En 2017, un año después de que fundara la empresa con su hermano y su padre, un banquero de inversión retirado, se registraron alrededor de 3 millones de dólares en transacciones en OnlyFans. Al año siguiente, Stokely recibió un correo electrónico de otro empresario del porno, un estadounidense llamado Leonid Radvinsky que tenía algunas ideas para el sitio web. «Nos quedamos muy, muy impresionados con sus ideas», declaró Stokely más tarde a The Financial Times, señalando que “pronto nos dimos cuenta de que compartíamos una visión similar para la plataforma”. En octubre de ese año, Radvinsky compró una participación de al menos el 75% en la entonces incipiente empresa por una suma desconocida. Un mes después, se hizo con el 100%, según consta en los registros de la empresa.
Este sería un momento decisivo para la empresa. En los estados financieros publicados a principios de este mes, Fenix International, la empresa matriz de OnlyFans, reveló que obtuvo 485 millones de dólares de beneficios con unos ingresos de 1.300 millones de dólares el pasado año. Esta cifra es superior a los 404 millones de dólares de 2022.
La plataforma cuenta con más de 305 millones de usuarios en todo el mundo que gastaron un total de 6.600 millones de dólares el año pasado en suscripciones a sus creadores favoritos. Suscribirse a un creador en OnlyFans cuesta entre 4,99 y 49,99 dólares (el sitio web se lleva una tajada del 20%). El mes pasado, OnlyFans se situó en el puesto 65 de los sitios web más populares de Estados Unidos, por delante de Xfinity, Yelp y Spotify, según la plataforma de análisis Similarweb.
La creciente popularidad de OnlyFans ha supuesto una enorme fuente de ingresos para Radvinsky; este multimillonario de 42 años saltó a los titulares el mes pasado tras pagarse a sí mismo la friolera de 472 millones de dólares en dividendos el año pasado, el equivalente a unos 1,2 millones de dólares al día. Ha desviado más de 1.000 millones de dólares en efectivo del negocio desde 2021, según los estados financieros de la empresa. Gracias a estos abultados pagos de dividendos y al creciente valor del negocio en su conjunto -valorado ahora por Forbes en casi 3.000 millones de dólares-, Radvinsky debuta este año en la lista Forbes 400 de los estadounidenses más ricos con un patrimonio neto estimado de 3.800 millones de dólares. Su fortuna casi se ha triplicado desde que Forbes le nombrase multimillonario por primera vez en 2022.
Sin embargo, a pesar de la notoriedad de su negocio, se sabe muy poco del propio Radvinsky. Mantiene un perfil muy bajo en Florida, donde vive, y no parece haber concedido ni una sola entrevista de prensa en toda su carrera. En lo que se cree que es su página de LinkedIn, se le describe como presidente de Leo.com, «un fondo de capital riesgo que invierte en empresas tecnológicas», pero no menciona a OnlyFans. Un sitio web de la empresa de capital riesgo describe a Radvinsky como un «respetado pionero del comercio electrónico y experimentado creador de empresas» y anuncia que proporcionará hasta un millón de dólares de financiación por empresa. El enlace a la lista de inversiones de la empresa no funciona.
Puede que Radvinsky no lo pregone en Internet, pero su fortuna está firmemente arraigada en el negocio del porno y se remonta a su primera empresa, que puso en marcha en 1999 a los 17 años, al parecer desde la casa de su madre en los suburbios de Chicago. Una investigación anterior de Forbes sobre el negocio, Cybertania Inc, detallaba cómo un Radvinsky adolescente hizo millones con su empresa, un turbio imperio de sitios web que anunciaban el acceso a contraseñas «ilegales» y «pirateadas» de páginas porno. En aquella época, el porno estaba menos disponible que ahora y Radvinsky parecía ganar dinero cobrando a los sitios porno por dirigir el tráfico hacia ellos.
Algunos de los sitios web de Radvinsky pretendían dirigir a los usuarios a contenidos pornográficos relacionados con menores de edad y zoofilia. Sin embargo, la investigación de Forbes de 2021, que descubrió casi una docena de nombres de dominio vinculados a Ravinsky (un informe afirma que poseía cientos), no encontró pruebas de que sus sitios enlazaran realmente con el contenido ilegal que prometían. (Y aunque Radvinsky era el operador, su madre -Anna- figuraba como presidenta, secretaria y directora de la empresa en un informe anual de 2007).
Al mismo tiempo que construía su negocio de referencias porno, Radvinsky se licenció en Económicas en la Universidad Northwestern, donde se graduó summa cum laude en 2003.
En su perfil de LinkedIn, el magnate del porno aparece como el mejor alumno de su promoción en Northwestern, aunque un portavoz de la universidad dijo a Forbes que esto no es cierto.«Northwestern no clasifica a sus estudiantes», dijo el portavoz en un correo electrónico.
Un año después de graduarse, Radvinsky se embarcó en su siguiente aventura: crear un sitio web de cámaras para adultos llamado MyFreeCams.com. En un momento dado, la publicación de la industria del sexo XBIZ describió el sitio como «una de las mayores comunidades de webcams para adultos del mundo». En 2010, según la publicación, MyFreeCams.com contaba con más de 100.000 «modelos» que vendían sus servicios a través de la plataforma y más de cinco millones de clientes. Aunque no hay datos financieros disponibles públicamente de ese negocio en concreto, es evidente que fue una bendición para Radvinsky, que gastó más de 10 millones de dólares en al menos seis apartamentos diferentes frente al lago en Chicago entre 2008 y 2016. (Nota: no está claro si Radvinsky sigue siendo propietario de MyFreeCams.com. MFCXY Inc, la empresa con sede en Illinois que Radvinsky creó para el sitio de webcams, se disolvió en 2021, mientras que una filial del Reino Unido de la que Radvinsky era director cesó sus operaciones en octubre de 2023).
Cuando compró OnlyFans en 2018, Radvinsky tenía dos décadas de experiencia como empresario porno de éxito. Nunca asumió un papel de liderazgo de cara al público en la firma (aparece como director de Fenix International, la empresa matriz, cuyas responsabilidades exactas no están claras). En un principio, Stokley permaneció como Consejero Delegado.Pero el negocio creció rápidamente después de que Radvinsky se involucrara, saltando de 13 millones de suscriptores en 2019 a 188 millones en 2021.La pandemia de Covid-19 jugó un papel destacado, ya que OnlyFans se convirtió en un imán para personas inquietas que buscaban una forma de ganar dinero desde casa.
La plataforma también se vio favorecida por una serie de celebridades -incluida la rapera Cardi B y la ex estrella de Disney Bella Thorne- que se unieron como creadores. Su fundador, Tim Stokely, atribuyó el mérito al programa de referidos de la empresa -que otorga el 5% de las ganancias de cualquier creador al que consigan dar de alta-.
Sin embargo, pronto surgió un abismo entre el propósito declarado del sitio y su uso real. Stokely restó importancia en repetidas ocasiones al hecho de que OnlyFans se centrara en contenidos para adultos. En agosto de 2021, la empresa anunció que prohibiría todo el contenido sexual explícito en la plataforma. Stokely culpó a los bancos, que, según él, se negaban a aceptar el negocio de OnlyFans. La medida provocó reacciones negativas y preguntas sobre cómo sobreviviría la plataforma a un giro tan importante, alejándose de su negocio principal.
Pocos días después del anuncio inicial, la empresa dio marcha atrás y explicó que había «obtenido las garantías necesarias para apoyar a nuestra diversa comunidad de creadores». Stokely dimitió como Consejero Delegado en diciembre y fue sustituido por Amrapali «Ami» Gan, ejecutivo de marketing de OnlyFans; Gan dejó el cargo en junio de 2023, mientras que la abogada Keily Blair, directora de estrategia y operaciones de la empresa, ocupó su lugar.
En resumen: continuar adaptando la pornografía ha ayudado a convertir a Onlyfans en una de las empresas -en el sector tecnológico- más rentables del Reino Unido. Con sólo 42 empleados a tiempo completo, su beneficio por empleado promedia 15,7 millones de dólares. Pero también ha generado problemas legales y éticos continuos. Una investigación de Reuters publicada en marzo detalló casi 140 casos en los que hombres y mujeres se quejaron de que se había publicado contenido sexualmente explícito sin su consentimiento. En mayo, el regulador de medios británico Ofcom abrió una investigación sobre las medidas de verificación de edad de OnlyFans después de que la compañía revelara que un «fallo técnico» significaba que su umbral de edad mínima se había establecido en 20 años en lugar de 23 (acorde con la normativa vigente en el país).
Antes de unirse a Onlyfans en 2022, Blair, el nuevo director ejecutivo de Onlyfans, trabajó como experto en datos y privacidad para el bufete de abogados Orrick, Herrington & Sutcliffe, con sede en Londres, del que Onlyfans era cliente. (El director jurídico de OnlyFans, Matt Reeder, también provenía del mismo bufete de abogados). En una entrevista en febrero, Blair dijo que sentía que su experiencia ayudaría a «reducir parte del riesgo inherente a la gestión de un negocio tecnológico, especialmente uno que es abierto y honesto sobre permitir contenido para adultos”. También que la compañía continúa enfocándose en oportunidades de expansión, incluida su plataforma de transmisión al video- estilo YouTube- OFTV (OnlyFans TV), que según ella está buscando licenciar su contenido a otras plataformas de transmisión.
«Quiero que la gente reconozca el negocio por lo que es, como una increíble historia de éxito tecnológico en el Reino Unido», dijo Blair en una entrevista a The Financial Times. Es una increíble historia de éxito tecnológico en el Reino Unido, cuyo centro es un magnate del porno estadounidense, y ahora una de las personas más ricas de EEEU.
Traducción de Silvia Suárez