A medida que el mundo se adapta a la pandemia, muchas personas buscan nuevas membresías de viaje y experiencias de élite para disfrutar. Para los amantes del vino adinerados, la respuesta es The Vines, también conocido como un nuevo «club exclusivo de exploradores y la primera comunidad mundial dedicada a la elaboración del vino». Y para hacerlo aún más exclusivo, la membresía es solo por invitación.
Para ser considerado, puede obtener una invitación de su propietario Michael Evans o completar un cuestionario en línea para tener la oportunidad de obtener una invitación. Una vez aceptados, los miembros pueden visitar las regiones vinícolas más emblemáticas del mundo, aprender a hacer vid con los propios maestros e incluso crear mezclas personalizadas. La idea es conocer el mundo elaborando vino teniendo puestos de avanzada en viñedos selectos. Los miembros podían elaborar sus propios vinos estableciendo relaciones con los viticultores y enólogos más creativos y célebres.
«Que nuestros miembros puedan hacer su propio Brunello con Giacomo en Casanova di Neri, un Napa Cab con Jeff y Tony en Hourglass, o incluso un champán personalizado con Michel Drappier, es simplemente de otro mundo: es como aprender a tirar con Michael Jordan», dice Evans. «Y los vinos que elaboran son únicos en todo el mundo: la única barrica (25 cajas) de ese vino específico que crearon con la guía de nuestros socios maestros enólogos».
Además de los viajes, los miembros reciben cajas de vino durante todo el año y tienen acceso a eventos relacionados con el vino, la comida, la cultura y la aventura. A medida que el club crezca, The Vines tendrá como objetivo ofrecer oportunidades de vinificación en 12 regiones diferentes y expandirse a otros terrenos ofreciendo a los miembros una serie de experiencias únicas como hacer Sake en Japón y Mezcal en México.
Evans lanzó el club de membresía The Vines a principios de 2020 después de fundar y administrar con éxito el resort de lujo y viñedo privado, The Vines of Mendoza en Argentina. Decidió desarrollar este proyecto hermano para que la gente conociera el mundo haciendo vino. Desde entonces se ha expandido una vez que los primeros miembros expresaron el mismo deseo de conocer estas regiones de manera única e íntima, como lo haría un local.
«Aunque de vez en cuando vamos con nuestros miembros a un restaurante con una estrella Michelin, lo que más nos entusiasma es el lugar fuera de lo común donde nuestros socios y amigos cenan con sus familias», apunta Evans. «En Italia, vamos a la caza de trufas, buscamos almejas en Oregón y hacemos queso en Francia. También jugamos un poco con el concepto alto-bajo donde, por ejemplo, organizamos una fiesta anual en Franklin BBQ en Austin (Texas), pero combinamos el BBQ con vinos de 100 puntos de todo el mundo».
En última instancia, según Evans, se trata de construir una comunidad global de aventureros con pasiones compartidas en torno a todos los aspectos de la cultura del vino. «Si bien el vino nos une, los aspectos sociales y comunitarios de estar con un grupo de apasionados amantes del vino que han viajado mucho es realmente especial y poderoso«, dice. «De hecho, tenemos varios miembros que no elaboran vino todos los años, simplemente se complacen en el grupo de miembros y las experiencias curadas».
«The Vines une a las personas creando momentos para recordar. Historias que maduran con cada narración y un vino increíble que honra esos momentos y recuerdos», añade. ¿Y el costo de recuerdos? Las tarifas de iniciación son de 100.000 dólares y las cuotas anuales son de 1.500 a 3.000 dólares por trimestre. Los costos de elaboración del vino por barril oscilan entre 7.000 y 37.000 dólares según el sitio.
