La industria ha sido históricamente el pulmón de la economía vasca. Desde mediados del siglo XIX, sus verdes paisajes encontraron fructífero contraste en el gris de sus siderurgias y altos hornos, semilla de una riqueza que perdura hasta nuestros días. Han quedado atrás, afortunadamente, los años de la amenaza terrorista, que afectó directamente a varias de estas familias. Hoy las compañías de Euskadi viven tiempos de prosperidad, como prueba el que esta comunidad aporte siete patronos a la lista de Los 100 españoles más ricos 2021 de Forbes. Las fundiciones siguen ocupando un espacio importante en su tejido empresarial, que no obstante se ha modernizado: un 60% se dedica a sectores innovadores. Energéticas, bodegas, corporaciones de salud, inmobiliarias e instituciones docentes completan el panorama.

Daniel Maté (Guipúzcoa): buenas acciones

El accionista (3,5%) de Glencore, multinacional anglosuiza dedicada a la producción y comercialización de metales y minerales, es la persona más adinerada del País Vasco: sus 2.200 millones de euros lo sitúan en el décimo puesto de la última lista de Forbes. Es también una de las fortunas que más ha crecido en el pasado año, pues en la anterior clasificación aparecía en vigésimo lugar con casi la mitad de dividendos. Para explicar su fulgurante ascenso hay que remitirse, primero, a la crisis de suministros de la pandemia y, después, al alza en los precios de las materias primas, lo que ha multiplicado el valor de esta compañía (en 2021 sus acciones se dispararon un 240%).

Todo lo que Maté tiene de rico lo tiene de discreto. Poco trasciende de su vida privada, entre otras cosas porque vive en Suiza. Nació en San Sebastián en 1963, se licenció en Economía y Derecho en la Universidad de Deusto y a los 25 años ya estaba trabajando a las órdenes de Marc Rich, el magnate de las materias primas. En 1994 compró, junto a otros ejecutivos, parte de los activos de la firma de Rich, lo que derivó en el alumbramiento de Glencore. Se sabe que a través de sociedades como Baech Bienes Inmuebles ha construido también un pequeño imperio inmobiliario, en el que destaca el histórico edificio de Telefónica en Barcelona, que compró por 100 millones en 2019.

José María Aristrain (Guipúzcoa): el hombre de acero

Su resistencia está fuera de toda duda. Creció en una familia amenazada por ETA (su aita era José María Aristrain Noain, uno de los empresarios más boyantes de España) lo que al parecer ha forjado un carácter esquivo. Durante la última década, José María hijo (Olaberria, Guipúzcoa, 1963) fue objeto de investigación por parte de la Fiscalía por lo que algunos medios denominaron “el fraude fiscal más grande de la Hacienda española”. La acusación pedía 40 años de cárcel. Finalmente, en enero de este año, la Audiencia de Madrid le ha absuelto de los cargos que se le imputaban.

José María heredó el negocio de su padre, la fundición JM Aristrain, cuando este falleció en 1989 en un accidente de helicóptero en la Costa Azul. Le compró a su hermana Ángeles su parte (ella también aparece en la lista de Forbes con 60 millones) y a partir de ese momento lideró la siderúrgica, que se integró en los noventa en Aceralia. Esta se fusionó con Arcelor a comienzos de este siglo, convirtiéndose en ArcelorMittal tras la entrada de una multinacional india. Hoy Aristrain conserva un 2% de la titularidad. Además, en 2014 adquirió el 11% de Tubacex (fabricante de tubos sin soldadura con sede en Llodio, Álava) por 39 millones. Aristrain aparece en el puesto #27 de los más ricos de España, con una fortuna de 950 millones.

Familia Arregui (Vizcaya/Álava): inagotable energía

El nombre de Juan Luis Arregui (Mallavia, Vizcaya, 1944; aunque alavés de adopción) va íntimamente ligado a los de Ence e Iberdrola. La primera, especializada en la generación de energía renovable con biomasa y la producción de celulosa de eucalipto, la presidió 13 años; un 26% sigue en su poder. En el consejo de administración de la empresa figuran actualmente sus hijos Gorka, Óscar y Javier Arregui Abendivar en calidad de consejeros dominicales. Resonante fue su paso por Iberdrola, de la que llegó a ser el máximo accionista individual (con un 2%), y que abandonó en 2010 para evitar la entrada de ACS en el consejo de administración.

Pero hasta llegar a Ence, Juan Luis Arregui ha protagonizado una trayectoria marcada por su marcado instinto para los negocios. Entre las firmas que han llevado su sello están Gamesa, que fundó en 1976 con Joseba Grajales (y que compró Siemens en 2017), y la fábrica de equipos para energéticas y navieras Guascor, de la que salió en 2004, quedándose, eso sí, con su filial Corporación Eólica. La familia diversifica sus intereses: el holding Turina 2000, Foresta Capital (producción de bosques nobles), Ciresco (cultivo de cereales, leguminosas y semillas oleaginosas), Copisa (bienes inmuebles), Investigación y Desarrollo Agrario, Artevino y Viñedos (bodegas Izadi, Vetus, Finca Villacreces o Vetus)… El patriarca atesora 650 millones de euros, cifra que le posiciona en el 42º lugar en la lista Forbes.

Los Urrutia (Vizcaya/Álava): tradición energética

Víctor de Urruria Vallejo es rico por parte de padre y de madre. Por línea paterna le viene su relación con empresas energéticas. Su abuelo fue Juan Urrutia Culueta (1866 – 1925), ingeniero que empezó construyendo presas y acabó dirgiendo Hidroeléctrica Ibérica, la Sociedad Española de Construcciones Babcock & Wilcox, el Banco de Crédito Industrial y la Sociedad de Electrificación Industrial; de la fusión de varias de esas empresas surgió Iberdrola. Ejerció, además, de consejero de la Compañía Madrileña de Tranvías, Gas Madrid y la Sociedad Ibérica de Construcciones Eléctricas. Su hijo Víctor Urrutia Usaola (1898 – 1982), ingeniero de caminos y periodista, participó en negocios de su padre y fue vicepresidente de Campsa y de Butano, consejero del Banco de Vizcaya y del Banco de Crédito Industrial y accionista de Norbega, la embotelladora de Coca-Cola en la zona norte de España.

Nacido en Madrid en 1942, Víctor de Urruria Vallejo (650 millones; #43 en la lista de Forbes) se convirtió en 1978 en el consejero más joven de Iberdrola, la cual llegó a vicepresidir. La abandonó en 2013. Fue asimismo consejero de Barclays Bank y Vocento. Posee un 6,24% de Ence y un 10% de Proeduca, matriz de UNIR (Universidad Internacional de La Rioja). En el consejo de administración del grupo docente se sienta su hijo Ramón Urrutia Ybarra. Su familia materna fundó las bodegas CVNE en 1879, de las que es accionista principal y presidente desde 2004, cuando su primo Luis Ignacio Vallejo le cedió el testigo. Sus hijos Víctor y María Urrutia Ybarra (45 millones cada uno) poseen sendas participaciones en la bodega de La Rioja alavesa (él es CEO y ella directora de marketing).

José María Galíndez Zubiría (Vizcaya): renovables solares

En Getxo (Vizcaya) se halla el exclusivo barrio de Negori, al que los Galíndez siempre han estado vinculados. En esa misma localidad, a 12 kilómetros de Bilbao, José Galíndez y su sobrino Pablo Burgos fundaron Solarpack (desarrolladora y generadora de energía solar fotovoltaica) en 2005. Ha sido suya hasta hace bien poco: en 2021, tras una opa del fondo sueco EQT vendieron a este sus acciones (un 51%) y se embolsaron 450 millones. Una pequeña parte la han reinvertido en Veleta BidCo, vehículo de inversión de EQT; otra, 175 millones, en comprar la Torre Bizkaia (antigua sede del BBVA en Bilbao), a medias con sus amigos los Ybarra Careaga, que también tenían un pellizco en Solarpack.

José Galíndez es, además, presidente de la Fundación EKI, que suministra energía limpia a escuelas y centros de salud de países en vías de desarrollo. Anteriormente, fue consejero delegado de Guascor, presidente de Sulzer Chemtech, en Winterthur (Suiza) y miembro del comité ejecutivo del Grupo Sulzer; cofundador y primer presidente de la Asociación Eólica Española y miembro de las juntas directivas de ASIF y de UNEF; miembro de los consejos de administración de ITP y de Velatia. También es consejero de Sener. En septiembre fue elegido presidente del Círculo de Empresarios Vascos. Con 400 millones de caja, José Galíndez ocupa el puesto #71 de los más ricos de España. Su padre fue Ángel Galíndez Celayeta (1918 – 2003), ingeniero que impulsó Iberduero, consejero de Altos Hornos y presidente del Banco de Vizcaya de 1975 a 1987. Ángel Galíndez solía decir que cada vez que se casaba uno de sus hijos, él se bajaba el sueldo, pues había una boca menos que alimentar en casa; tuvo nueve.

Familia Ybarra Careaga (Vizcaya): la aristocracia del norte

Los Ybarra son el clan industrial vizcaíno por antonomasia. A principios del siglo XIX, José Antonio Ybarra de los Santos empezó a comerciar con hierro y en 1828 constituyó Ybarra, Mier y Compañía. En 1854 edificó la conocida como fábrica del Carmen, germen de Altos Hornos de Vizcaya. Él y sus hijos establecieron lazos empresariales y afectivos con eminentes familias como los Zubiría, los Vilallonga o el marques de Comillas; sus negocios llegaron a Sevilla. En 1860, uno de los nietos del fundador, José Antonio Ybarra Arregui, se casó con Elena González de Careaga Quiroga, iniciando así una rama familiar de industriales, banqueros y alcaldes que cuatro generaciones después sigue combinando los dos mismos apellidos.

Pedro de Careaga (1896 – 1986), conde de Cadagua, presidió Iberduero y fue consejero de General Electric y BBV. Su yerno, Fernando de Ybarra y López Dóriga (1930 – 2001), marqués de Arriluce, fue presidente de Sevillana de Electricidad y consejero de BBVA. Su viuda, Carmen Careaga (1934), lidera la saga (325 millones; #83) en compañía de su hija María del Carmen Ybarra Careaga (1963) y su sobrino Álvaro Ybarra. Gestionan Onchena, uno de los grandes patrimonios empresariales de España. Onchena ha operado en MásMóvil (cuyas acciones vendió en 2020 por 393 millones en 2020) y Solarpack (despachadas en 2021 por 57 millones). Participa en socimis como Alagro, Vitruvio, Atrys y Aguile, así como en diversas sicav. En marzo de 2022 ha entrado en el consejo de Ecoener

Joseba Grajales (Álava): en el centro de la salud

Con 250 millones de hacienda, Joseba Mikel Grajales Jiménez se ubica en el puesto #98 de la lista Forbes de 2021. Es el presidente y principal accionista del Grupo Keralty, división de Sanitas en América Latina y Pacífico Occidental, dotada de 11 hospitales, oficinas en 74 ciudades de siete países (Colombia, Venezuela, Preú, Brasil, Estados Unidos, México y Filipinas), 24.000 empleados y siete millones de clientes. Fundó Gamesa y Guascor con Juan Luis Arregui, por lo que también se le considera uno de los pioneros de las energías renovables en el País Vasco. Tras la venta de Guascor por 207 millones, que acabó en poder de Siemens, fundó en 2012 el Grupo Fénix, dedicado a la explotación de gas, junto con el exvicelehendakari Jon Azua.

Familia Ucín (Guipúzcoa): rompecabezas de inversiones

Son los herederos de Marcial Ucín Odriozola (1898 – 1972), histórico empresario del acero que fundó la fábrica que lleva su nombre y que, con el tiempo, se amplió con Corrugados Azpeitia, Corrugados Lasao y Getafe y las plantas ADA de Bayona y de Esteban Orbegozo, en Zumarraga (vendidas a Aceralia en 1999 por 29.000 millones de pesetas, 174 millones de euros). La incorporación de su hijo Pedro Ucín Aramendi y su yerno Jesús Guibert Azcue dio un nuevo impulso al negocio. Pedro Ucín reunió además intereses en Bodegas Olarra (vinos), Algeposa (portuaria), Rugui Steel (siderúrgica) y Antiguo Berri (inmobiliaria). Jesús Guibert fue secuestrado por ETA en 1983 (y liberado tras pagar un rescate de 200 millones, 1,2 millones de euros).

La lista Forbes atribuye a cada sucesor 190 millones. Pedro Ucín falleció en 2017 a los 92 años. Su hijo Marcial Ucín Larrañaga preside Bodegas Olarra, Riberas del Urumea, Inmobiliaria Anzarán, Inversiones Sectores Varios SL, Ecología, Reciclaje y Medio Ambiente SL, Calpenor SL y AIEK Sistemak. Elena Ucín y Jesús Guibert tuvieron cuatro hijos, dos de los cuales, María Luisa y Rafael, han seguido la senda empresarial; la primera (1958) es CEO de Algeposa (logística portuaria y ferroviaria) y consejera de Iberpapel, Rugui SL, Accesorios de Tubería SA (ATUSA), Riberas de Urumea y Corporación Financiera Alba. Rafael es vicepresidente de Inversiones Sectores Varios. José María (1962), otro de los hijos del matrimonio, es jesuita y rector de la Universidad de Deusto desde 2013.

Familia Zardoya Arana (Guipúzcoa): un largo viaje en ascensor

Durante más de un siglo han estado vinculados a Zardoya SA, empresa de montacargas fundada en el barrio de Herrera (San Sebastián) en 1919 y que en la década de 1950 se convirtió en referente de la fabricación de ascensores tras la sucesiva compra de otras compañías españolas del ramo. En 1972 se fusionó con la alemana Otis, dando lugar a Zardoya Otis SA. En estos días la familia está a punto de despedirse de la que fue su casa tras la opa lanzada por Otis en diciembre de 2021 para hacerse con el control total. Desde hace décadas son los hermanos Alberto, María Teresa y Luisa Zardoya Arana (110 millones cada uno) quienes se ocupan de los negocios de la saga, entre los que se cuenta una participación en Mecalux, fabricante de estantes metálicos para naves industriales.

También en la élite empresarial vasca

Otros nombres propios musculan la economía de Euskadi. Como los Madariaga, que este 2022 celebran el 50 aniversario de Ingeteam, dedicada a la conversión de energía eléctrica; los Ormazábal, origen de Velentia, grupo internacional de empresas industriales y tecnológicas; los Endagorta, jefes de Sener, grupo de ingeniería que emplea a 2.350 personas en cinco continentes y que recibió en 2021 el premio Mejor Empresa Europea de Ingeniería en Gobierno Corporativo; los Delclaux, dueños de Vidrala desde 1965, presidida desde hace dos décadas por Carlos Delclaux Zulueta, vinculado en el pasado con el BBVA (Cosme Delclaux estuvo 232 días secuestrado por ETA en 1997); o José Eulalio Poza, fundador de MásMóvil.