La agencia de calificación internacional Moody’s ha decidido subir el rating de Prisa, que pasa a ser ‘B3’ con perspectiva estable por, según explica, su «robusta» evolución operativa en los últimos tres años y su esfuerzo por reducir la deuda.
«La mejora del rating refleja métricas crediticias más sólidas, respaldadas por un mejor desempeño operativo en los últimos tres años y los esfuerzos de la compañía para reducir su carga de deuda, incluida la emisión de obligaciones necesariamente convertibles en acciones», ha asegurado Víctor García Capdevila, vicepresidente-analista senior de Moody’s y analista principal de Prisa.
En su nota pública, la agencia insiste en que «la calificación B3 refleja el robusto desempeño operativo y financiero de la compañía durante los últimos tres años; y la considerable mejora en sus métricas crediticias clave».
Moody’s destaca especialmente que «las cuestiones de gobierno corporativo son importantes para la calificación porque la política financiera de Prisa es más conservadora que en el pasado». «La compañía sigue demostrando su voluntad de reducir los niveles de deuda», añade.
Asimismo, subraya que en febrero de 2023, Prisa emitió bonos convertibles por 130 millones de euros «para amortizar parte del tramo junior de su deuda sindicada». «En enero de 2024, la compañía anunció la emisión de hasta otros 100 millones de euros en bonos convertibles para cancelar el tramo junior restante de 87 millones de euros de su deuda sindicada. Esto ha dado lugar a un cambio en la puntuación de la estrategia financiera y la gestión de riesgos de la empresa», subraya.
Dentro de su argumentación, Moody’s también sostiene que «la calificación B3 refleja las posiciones de liderazgo de Prisa en el mercado de los medios de comunicación y la resiliencia del negocio de educación en Latinoamérica –donde Santillana es líder–, que se ve reforzado por la creciente contribución de los modelos de suscripción basados en sistemas digitales de aprendizaje».
La agencia considera que la posición de liquidez de la compañía es adecuada y argumenta el mantenimiento del outlook asumiendo que «la compañía seguirá teniendo un desempeño operativo sólido durante los próximos 12 a 18 meses».