El ministro para la Transformación Digital y de la Función Pública, José Luis Escrivá, ha pedido esperar a que los tribunales españoles interpreten la sentencia del Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TUE), que considera que el Derecho español no disuade del abuso de interinos en las Administraciones Públicas y plantea hacerlos fijos, ya que se ha hecho una interpretación «muy extensiva» sobre la misma.
Así, el ministro ha pedido esperar a ver cómo los tribunales españoles interpretan lo que les sugiere el TUE, ya que, en su opinión, dicha sentencia se refiere a «unos casos muy concretos», y traslada de una forma «clara» a los tribunales españoles la toma de decisiones finales.
De esta manera se ha pronunciado el titular de Función Pública sobre este asunto durante el desayuno informativo organizado por Nueva Economía Fórum en Madrid, después de que ayer se conociera que el TUE apunta «a falta de medidas adecuadas» en la legislación española para prevenir y sancionar con arreglo a las normas europeas los abusos derivados de la utilización sucesiva de contratos temporales, incluidos los contratos indefinidos no fijos prorrogados sucesivamente.
En la sentencia, el TUE considera que corresponde a la Justicia española modificar la jurisprudencia nacional consolidada si ésta se basa en una interpretación incompatible con los objetivos de la legislación europea, particularmente con el Acuerdo Marco sobre el trabajo de duración determinada.
EXCESIVA TEMPORALIDAD
Durante el desayuno, Escrivá ha subrayado que el problema de fondo es la excesiva temporalidad que ha habido en España «durante décadas» y que todavía sigue existiendo. «En España hemos entendido que la flexibilidad en las relaciones laborales se conseguía tanto en lo público como en lo privado (…) teniendo grandes reservas de trabajadores temporales que se podían ajustar para arriba y abajo», ha indicado.
Por tanto, esta temporalidad es el motivo por el que Europa «nos entiende mal, nos ha entendido mal y tiene razón para entendernos mal», ha recalcado Escrivá, quién también ha detallado que esto «no solo [pasa] con esta sentencia, sino en distintos informes o discusiones en el marco del Plan de Recuperación».
«De hecho, muchas de las decisiones que se han tomado en España, en el sector público ahora, en relación a los recursos humanos, incluso a nivel de microgestión, los tomaba una dirección general que se llama de Costes de personal. Por lo tanto, los recursos humanos en la Administración Pública se entendían como un coste, cuando los recursos humanos son inversión a largo plazo (…) y esto nos ha pasado también en el sector privado», se ha lamentado Escrivá.
Así, ha apuntado que esta situación es la que se está intentando paliar con la reforma laboral y lo que se va a abordar en la Administración Pública, a través de la planificación de los recursos humanos y la eliminación de la tasa de reposición que se anunció desde la cartera de Función Pública hace unas semanas.
Para Escrivá, es necesario caminar hacia un modelo en la Administración que tenga un marco de referencia basado en competencias funcionales, en el que se defina perfectamente qué tipo de funcionarios y trabajadores públicos hace falta y, posteriormente, buscar qué perfil cubre esta función.
«Esta planificación no existe ni en la Administración General del Estado, ni en prácticamente ninguna administración pública en España. Esta es la gran transformación», ha sentenciado.