El Índice de Precios al Consumidor (IPC) de Brasil ha caído 0,06 puntos porcentuales en diciembre respecto al mes anterior, situándose en el 4,62% interanual, lo que le permite mantener la senda descendente que había recuperado en octubre, tras ligeros incrementos en los tres meses anteriores.
Según ha informado este jueves el Instituto Brasileño de Geografía y Estadística (IBGE), la inflación se mantiene en niveles de marzo, cuando se situaba en el 4,65% interanual y se encontraba en pleno proceso de desaceleración.
Por su parte, la inflación mensual ha sido del 0,56 en noviembre, lo que supone más que duplicar el 0,24% de noviembre y el sexto mes seguido de alzas. En el acumulado del año, la inflación se encuentra en el 4,62%.
De los nueve grupos de productos y servicios, todos registraron aumentos en diciembre. La mayor variación (del 1,11% mensual) se dio en la división de alimentos y bebidas no alcohólicas, siendo este un incremento de casi cinco décimas desde noviembre. Le siguen los artículos de residencia (0,76%) y transporte y gastos personales (0,48% en ambos casos).
En este contexto, el Banco Central de Brasil optó en su última reunión de política monetaria del año por recortar los tipos en 50 puntos básicos, siendo este el ritmo «adecuado» para mantener el proceso desinflacionario. Desde agosto, cuando la tasa estaba en el 13,75%, se ha dado un descenso de 200 puntos básicos, hasta el 11,75%.