La gestora Schroders ha señalado este miércoles en un informe que el mercado asiático de bonos ganará impulso en 2024 toda vez que, tal y como descuenta la mayoría del mercado, la Reserva Federal (Fed) recorte los tipos de interés, lo que a su vez se traducirá en una depreciación del dólar, cuya fortaleza ha sido hasta ahora el «principal viento en contra» para los bonos y divisas de Asia.
Asimismo, en el informe firmado por el director de inversiones de renta fija para Asia en Schroders, Chris Wong, se ha aducido que el «lento crecimiento de China probablemente toque suelo» y que las medidas de estímulo (recortes de tipos, aumento del déficit presupuestario, etc.) del gobierno ayudarán a estabilizar el crecimiento e impulsarán el sentimiento general hacia Asia.
De manera más concreta, la firma ha apuntado que un bono de gobierno en el que tienen una «alta convicción» es el de Indonesia, ya que cuenta con «unos fundamentales macro muy sólidos y ofrece rendimientos reales atractivos».
En concreto, los datos del mercado consultados por Europa Press han arrojado que el interés del bono indonesio a dos años cerró este madrugada en el 6,287%, mientras que el bono a diez años ha finalizado en el 6,442%.
«El país [Indonesia] tiene una deuda de gobierno baja en comparación con otros países asiáticos similares y se postula para beneficiarse de una demografía favorable y un aumento en la inversión extranjera directa», ha agregado el informe de Wong.
De su lado, en cuanto a créditos de divisas fuertes en Asia, han expresado su preferencia por la inversión en ‘investment grade’ (suelen estar respaldados por un elevado grado de solvencia) frente al ‘high yield’ (mayor rendimiento a costa de un mayor riesgo), en tanto que ven oportunidades en industrias como la financiera, plataformas de Internet chinas y energías renovables de la India.