La inversión en activos inmobiliarios en España ha caído un 29% entre enero y septiembre de este año, hasta los 13.000 millones de euros, en sintonía con el resto de Europa, donde decreció hasta los 119.000 millones de euros, menos de la mitad de lo registrado en el mismo periodo del año anterior.

«El inmobiliario europeo se mantiene en una situación de esperar y ver, hasta que se produzca una mejora de las condiciones de financiación y un ajuste de la valoración de los activos», se señala en el estudio ‘Tendencias en el mercado inmobiliario en Europa 2024’ elaborado por PwC y Urban Land Institute.

De cara a 2024, las principales preocupaciones desde el punto de vista macroeconómico apuntadas en el informe son el incremento del precio del dinero (86%), la evolución de la inflación (83%) y la debilidad económica en la zona euro (75%).

A estas preocupaciones se añaden la inestabilidad política, tanto dentro de Europa -con una posible escalada de la guerra entre Rusia y Ucrania (78%)- como fuera del Viejo Continente (74%), con el riesgo de la expansión internacional del conflicto entre Israel y Gaza.

Sin embargo, muchos encuestados señalan que, a lo largo del próximo año, se podría empezar a ver una mejora de la inflación (66%) y de los tipos de interés a largo plazo (45%) en Europa y, por tanto, una cierta reactivación de la actividad.

Desde el punto de las cuestiones específicas del sector, los tres factores que más preocupan a los actores del inmobiliario europeo son el incremento de los costes de construcción (79%), los requerimientos de capex (67%), y las exigencias crecientes en el ámbito de la descarbonización y el medioambiente (67%).

En cuanto a las inversiones por las que más se está apostando, destacan la inversión en infraestructuras de energía, los centros de datos, las instalaciones relacionadas con las ciencias de la salud, las residencias de estudiantes, las de mayores y las instalaciones de auto almacenamiento.

«El sector inmobiliario europeo se ve especialmente impactado por la situación macroeconómica y la inestabilidad política, pero estamos viendo que los efectos que se derivan de estas situaciones son selectivos en lo que respecta a la tipología de activos y a las localizaciones», ha afirmado el socio responsable del sector de Inmobiliario Construcción y Servicios en PwC, Antonio Sánchez-Recio.

Por su parte, la directora Ejecutiva de ULI Spain, Barbara Recio, ha señalado que las perspectivas para el sector inmobiliario a medio plazo son mucho «más positivas», asumiendo que para entonces los tipos se habrán estabilizado y la incertidumbre económica se habrá resuelto en gran medida.

MADRID, LA TERCERA CIUDAD EUROPEA MÁS ATRACTIVA PARA INVERTIR

La capital de España, Madrid, ha sido seleccionada como la tercera ciudad europea más atractiva para la inversión, pasando de la sexta a la tercera posición en los últimos cuatro años.

De esta manera, en el informe se señala que Madrid cuenta con una población estable, una gran capacidad para atraer inmigrantes, estudiantes y un gran número de turistas. También sobresale por su crecimiento económico, por la solidez de sus infraestructuras y por ser una ciudad abierta al mundo de los negocios.