Economía

UGT avisa de que los riesgos psicosociales son «la futura pandemia» y pide regular la desconexión digital

La secretaria de Salud Laboral de UGT, Ana García de la Torre, ha afirmado este lunes que los riesgos psicosociales «no son nuevos ni emergentes», sino que son «los grandes olvidados» de los sistemas de gestión de prevención de riesgos laborales en las empresas «y se perfilan como la futura pandemia».

Durante la inauguración de una jornada sobre salud laboral organizada por el sindicato, García ha considerado fundamental la participación y consulta de los representantes de los trabajadores en la prevención de riesgos laborales derivados de la digitalización.

Según los datos de la encuesta OSH Pulse 2022, los teletrabajadores reportan un aumento de la carga de trabajo, de aislamiento social y una «severa» presión de tiempo o sobrecarga de trabajo con mayor frecuencia que el total de la población ocupada.

García ha señalado que los nuevos modelos de trabajo, centrados en la digitalización, «generan oportunidades, pero también desafíos y riesgos para la salud laboral», como son la pérdida de autonomía y la intensificación del trabajo; los algoritmos, que sustituyen el trabajo humano; el aislamiento de los trabajadores; una responsabilidad poco clara en materia de salud laboral, y una disponibilidad laboral «de 24 horas al día».

«Las nuevas tecnologías y la digitalización también han cambiado la propia forma de organizar el trabajo y de llevar a cabo la prestación del servicio, lo que ha supuesto la irrupción de nuevos factores de riesgo, especialmente de tipo psicosocial, a los que debemos estar necesariamente atentos», ha advertido la responsable sindical, que ha citado entre estos factores la hiperconectividad, la carga de trabajo cuantitativa y la sobrecarga cualitativa.

Para la secretaria de Salud Laboral de UGT, otro tema que debe abordarse es la conciliación de la vida laboral y personal, pues con el empleo de las nuevas tecnologías «el tiempo de trabajo se vuelve más difuso».

En su opinión, la flexibilidad horaria o la falta de horario también es perjudicial para la salud y la «autogestión» del tiempo de trabajo «encierra una trampa: abre la libertad para autoexplotarse».

Por ello, García ha abogado por la regulación de la desconexión digital, advirtiendo de que la conectividad o posibilidad de estar conectado «no debe ser sinónimo de disponibilidad permanente del trabajador».

La responsable sindical ha recordado que en España, la desconexión digital se regula a través de la Ley Orgánica de Protección de Datos Personales y Garantía de Derechos Digitales y del Estatuto de los Trabajadores y en la Ley del Teletrabajo, pero, para UGT, el marco idóneo para regular el derecho a la desconexión digital es la Ley de Prevención de Riesgos Laborales y no la de Protección de Datos.

Además, ha manifestado la necesidad de que este derecho se regule a través de la negociación colectiva, definiendo y delimitando los horarios en los que no se pueden enviar correos electrónicos de carácter profesional; estableciendo días «face to face» para revalorizar las relaciones entre compañeros y superiores, y acordando que los directivos de las empresas prediquen con el ejemplo y respeten las premisas de desconexión que se alcancen en los acuerdos.