El Banco Central de Brasil vislumbra que el escenario externo será «más complejo» en los próximos meses, con la irrupción de un nuevo conflicto bélico en el mundo, lo que podría tener un efecto en la evolución de los datos macroeconómicos, aunque mantiene su idea de seguir aplicando recortes de 50 puntos básicos en la tasa de política monetaria.
Así lo ha adelantado el director de política monetaria del Banco Central, Gabriel Galípolo, quien ha asegurado que es «temprano» para ver qué efectos tendrá la guerra entre Israel y Hamás en variables económicas como el tipo de cambio o el precio del petróleo.
No obstante, para el director podría ser acertado mantener el ritmo de recortes ya que permite simultáneamente ajustar el nivel de contracción de la política monetaria y ganar tiempo para observar el comportamiento de la economía en función de estos recortes.
«Vamos a tener que esperar para ver cuáles van a ser las reacciones económicas y poder ajustar nuestra política en función de los datos que llegan. Hacer una previsión de los próximos movimientos es un deporte de alto riesgo», ha afirmado.
Pese a los últimos acontecimientos, Galípolo ha señalado que la inflación converge por una senda «benigna» y está mostrando resiliencia frente a los impactos externos, al mismo tiempo que ciertos desafíos internos como el incremento del consumo no están ejerciendo presión sobre su evolución.
EVOLUCIÓN DEL DÓLAR Y EL PETRÓLEO
En este escenario, el cambio del dólar y el precio del petróleo, que ya eran elementos que preocupaban al mercado, han pasado a ganar más atención como dos variables que pueden tener un efecto «adverso» en la inflación.
Según ha apuntado el miembro del banco central, el precio del dólar es un factor a tener en cuenta para una economía emergente como Brasil, siendo muy relevante como fluctúan los tipos de interés en la nación norteamericana.
«Nuestra política monetaria o los rayos de libertad que tenemos están bastante restringidos o delimitados en función de la política monetaria norteamericana», ha subrayado Galípolo.
Además, la posible entrada de Irán en el conflicto bélico de Oriente Próximo podría suponer un mayor desafío geopolítico, con previsibles consecuencias «dramáticas» sobre el precio del barril de petróleo, que en los últimos días no ha hecho más que subir.
No obstante, aunque es muy difícil mantener la resiliencia económica, Brasil cuenta a su favor con grandes ventajas competitivas frente a buena parte de sus pares al ser un país con reservas internacionales suficientes que evidencian su solvencia y le permite «protegerse» de ciertas oscilaciones de la economía internacional.
Del mismo modo, los países de América Latina se encuentran «un poco adelantados» en el combate contra el proceso inflacionario, tal y como ha comentado el responsable del banco, al haber actuado de una forma más rápida desde el principio. «Estamos en una situación ventajosa», ha expresado.