La Unión General de Trabajadores (UGT) ha exigido un cambio de rumbo en la política económica para tener en cuenta las necesidades de la economía real y el bienestar de la clase trabajadora europea, después de que el BCE haya subido los tipos de interés este jueves otros 25 puntos básicos, hasta el 4,25%.
En un comunicado, el sindicato ha afirmado que esta subida de tipos tendrá «una repercusión negativa manifiesta en las familias», que ven cada mes como el pago de sus hipotecas no para de aumentar, y ha advertido de que la subida de tipos no asegura una bajada de precios, ya que las empresas pueden seguir manteniendo los beneficios aún en un contexto de altos costes de producción.
«Los postulados monetaristas más estrictos se han adueñado de un BCE obsesionado únicamente por el control de la inflación a toda costa, aunque la clase trabajadora vea perjudicada sus condiciones de vida», ha concluido el sindicato.