Kutxabank se ha adherido a la Asociación para la Contabilidad
Financiera del Carbono (PCAF), «en línea con su compromiso de favorecer la descarbonización del sector financiero».
Según ha explicado el banco vasco en un comunicado, la descarbonización y la lucha contra el cambio climático son «una prioridad para la entidad», por lo que su adhesión a PCAF supone «un paso más en la comunicación fiel y transparente que ofrece a la sociedad y a todos sus grupos de interés en relación con su huella de carbono».
Para Kutxabank, el cálculo de emisiones de gases efecto invernadero es «esencial» para establecer un plan de transición hacia una economía baja en emisiones, «lo que incluye la fijación de objetivos de descarbonización sectoriales».
La entidad financiera considera necesario conocer la situación
actual, «para poder ayudar a sus contrapartes en una apuesta firme hacia la descarbonización».
Los principios ESG –criterios ambientales, sociales y de gobernanza- se encuentran «profundamente arraigados en el Grupo financiero, forman parte de su ADN y de su razón de ser», según Kutxabank. «De hecho, han marcado su estrategia y modelo de negocio a lo largo de toda su historia», ha añadido.
La Asociación para la Contabilidad Financiera del Carbono (PCAF) constituye una colaboración entre instituciones financieras de todo el mundo, que permite «la divulgación armonizada de las emisiones de gases de efecto invernadero generadas por los préstamos y las
inversiones financieras».
Está integrada por más de 400 instituciones financieras de todo el
mundo, «y se está expandiendo rápidamente en Norteamérica, Latinoamérica, Europa, África y Asia-Pacífico».