El Gobierno se ha mostrado confiado en que la moderación de los precios de los costes se vaya trasladando a lo largo de la cadena alimentaria y llegue finalmente a los precios, aunque ha advertido del posible impacto que podría tener la sequía en este contexto de incertidumbre.
«Estamos en permanente contacto con la industria y la distribución por el funcionamiento de la cadena, que si no se dan situaciones anormales, entendemos que la situación no se agravaría y la inflación de costes se moderaría. Esperamos que si la situación de la sequía no arroja situaciones extremas, la moderación de los costes se refleje en los precios», ha indicado el secretario general de Agricultura y Alimentación, Fernando Miranda, durante la presentación de los datos económicos de la industria de la alimentación y bebidas.
Miranda, que ha advertido de que el Ministerio de Agricultura está «vigilante» en el tema de los precios para que las «cadenas se comporten como deben hacerlo» en este contexto, ha reconocido que es complicado saber qué día exacto podrían empezar a bajar.
«No hay un día en concreto en el que digamos este día bajarán los precios. Estamos en un momento de muchísima incertidumbre y hay que guardar a ver el impacto que tenga la sequía. A medida que muchas materias primas van moderando sus precios se observa un decalaje y en algunos sectores se percibe una bajada de precios, pero depende mucho de la coyuntura de cada uno», ha subrayado.
Por su parte, el director general de FIAB, Mauricio García de Quevedo, ha reiterado el esfuerzo que en este contexto «difícil y complejo» están llevando a cabo las empresas de alimentación y bebidas españolas.
«Durante 2022 hemos sufrido una crisis global, en parte como consecuencia de la invasión de Ucrania, que ha generado incertidumbre, inestabilidad y la grave situación de inflación que todos padecemos. Los resultados presentados por muchas empresas del sector demuestran cómo han reducido sus márgenes para no trasladar al consumidor las subidas que han sufrido», ha indicado.
De esta forma, García de Quevedo ha recordado que las empresas de esta industria han bajado sus márgenes y su rentabilidad, como se ha visto en la presentación de sus resultados del pasado ejercicio. «No creo que haya habido especulación, al contrario, han absorbido parte de los costes», ha señalado ante las acusaciones que se han recibido de determinados sectores.
«No me cabe duda de que se reflejará en los precios en la medida en que se empiecen a notar la caída de los costes, pero hay un cierto decalaje. En el momento en el que fluctúen los precios, igual que sucede a la alta sucederá a la baja», ha reconocido.
Respecto a las medidas que solicitaron al Gobierno para frenar el alza de los precios, García de Quevedo ha señalado que su federación propuso la bajada del IVA, que se ha tenido en cuenta «a medias», ya que no se incluyó la carne y el pescado, algo que siguen reclamando, así como el retraso de determinados impuestos, como el del plástico, para un contexto «más estable». «Creemos que esas dos medidas y la ayuda directa a familias podían haber impactado más en la contención de la inflación», ha señalado.