Economía

El banco central de Colombia ve la inflación en la dirección «deseada» aunque advierte de cierta persistencia

El Banco de la República (el banco central de Colombia) considera que la inflación «se aproxima a su techo» y camina por la dirección «deseada», lo que le ha llevado en su última reunión de política monetaria a aplicar un aumento de menor magnitud en los tipos de interés, pudiendo ser la última etapa de su ciclo alcista, aunque ha advertido que las decisiones sucesivas que se adopten dependerán de la nueva información disponible.

En este sentido, si bien hay señales «alentadoras» en cuanto a la desaceleración de la inflación total, se mantiene la persistencia de la inflación básica presionada por los efectos de la indexación de precios. En consecuencia, se podría dificultar el proceso de convergencia a la meta en los plazos planteados.

Así se desprende del acta del último encuentro de la Junta del banco, en el que se aplicó un incremento de 25 puntos básicos, hasta elevar los tipos de interés al 13%. Como ya adelantó el pasado jueves el gerente general del banco, Leonardo Villar, la política monetaria se aproxima a su techo, atendiendo a las noticias «positivas» que podría traer la inflación en los próximos meses.

La última subida obedece pues a la intención de asegurar el retorno de la inflación hacia la meta de 3% que el banco se ha propuesto alcanzar hacia finales de 2024.

Sin embargo, el comportamiento de la economía, cuyo buen desempeño está retrasando el ajuste entre oferta y demanda, también podría tener un efecto sobre la senda de la inflación. «Las señales de una menor desaceleración de la actividad económica podrían prolongar el dinamismo del consumo privado y retardar la corrección de los excesos de demanda», recoge el acta.

Asimismo, la entidad ha anotado que la sensibilidad de la economía a choques externos se ha incrementado y subsiste el riesgo de una elevada volatilidad de la tasa de cambio, más aún ante perspectivas de menores precios del petróleo.