El Consejo de Estabilidad Financiera (CEF), organismo internacional creado tras la cumbre del G-20 de 2009, se ha mostrado satisfecho con las medidas tomadas por las autoridades suizas y estadounidenses a la hora de abordar la incertidumbre financiera fruto de la crisis del Credit Suisse y el Silicon Valley Bank, respectivamente.

«Hechos recientes muestran la importancia de las reformas financieras adoptadas por el G20 tras la crisis de 2008, las cuales han reforzado la resiliencia de las instituciones bancarias», ha celebrado el organismo, refiriéndose a medidas como el incremento de capitales y liquidez mínimos o a la coordinación reguladora entre países, entre otras.

«Un sistema financiero global abierto y sólido, firmemente asentado en principios acordados de forma multilateral, es crucial para un crecimiento sostenible», ha añadido.

Asimismo, el CEF ha afirmado que permanecerá «atento» y «preparado» para implementar las medidas que sean necesarias para mantener la estabilidad financiera, así como para promover la cooperación internacional e identificar vulnerabilidades en el sistema bancario.