El proceso de globalización de la economía está registrando cambios en su naturaleza que impulsan las relaciones comerciales dentro de bloques de países que comparten valores e intereses, según ha señalado la presidenta del Banco Central Europeo (BCE), Christine Lagarde, que ha rechazado que exista un proceso de «desglobalización», aunque sí un mayor proteccionismo.
«El proteccionismo va en aumento, y bien puede empeorar, a medida que los países reconfiguran sus cadenas de suministro para alinearse con nuevos objetivos estratégicos», ha afirmado la francesa en un acto de la Organización Mundial del Comercio (OMC).
«Esto no quiere decir que nos enfrentemos a una desglobalización total, ni mucho menos», ha defendido la presidenta del BCE, subrayando que la lógica económica que sustenta las ganancias del comercio internacional sigue siendo tan válida como siempre para los gobiernos y las empresas por igual.
Sin embargo, para Lagarde «la naturaleza de la globalización está cambiando», por lo que considera probable un aumento del comercio dentro de bloques a medida que los países que comparten valores e intereses comunes profundicen sus lazos comerciales para aumentar su resiliencia ante los impactos y amenazas externos.
En este sentido, recordando la celebración del 8 de marzo, la francesa ha advertido de que esta naturaleza cambiante de la globalización puede tener implicaciones para el empoderamiento de las mujeres, ya que los países que están más abiertos al comercio tienden a tener niveles más altos de igualdad de género.
«Por lo tanto, debemos actuar de inmediato, no solo para preservar, sino también para expandir los logros existentes obtenidos para el empoderamiento económico de las mujeres. Y debemos asegurarnos de que una economía global cambiante no introduzca nuevas desigualdades», ha subrayado.