La vicepresidenta tercera y ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Teresa Ribera, ha asegurado que el proyecto para construir un corredor energético entre Barcelona y Marsella (H2Med) no está en peligro tras la polémica del pasado viernes con Francia y vinculada al interés del país galo en que por esa infraestructura circule hidrógeno de origen nuclear.

«No, no creo que esté en peligro. Creo que hay un consenso muy elevado a nivel europeo sobre la importancia de las interconexiones. Es verdad que el debate sobre cómo aseguramos que Francia se pueda sentir cómoda en su opción en favor de la energía nuclear es un debate importante. Todos sentimos que esto es una prioridad para el Gobierno francés, pero no creo que eso tenga un impacto en la relación bilateral», ha detallado la ministra ante la prensa tras participar en la Conferencia Internacional de Energías Renovables (IREC) que se celebra en Madrid hasta el 23 de febrero.

En esa línea, ha resaltado también que el compromiso de Francia con el proyecto es «serio», tanto en materia de inversión como en su contribución al desarrollo de esta infraestructura.

Ribera, que compareció ante los medios tras la firma de un acuerdo de cooperación en materia de hidrógeno renovable con Países Bajos, ha opinado también que es necesario que en Europa se deje claro y se diferencie bien entre el hidrógeno renovable o verde y el de bajas emisiones, en referencia, entre otros, al nuclear (denominado hidrógeno rosa).

«A nuestro juicio, contar con una regulación temprana de hidrógeno es importante. Al mismo tiempo, es delicado confundir hidrógeno renovable con el ‘low carbon’ (bajo en emisiones). Hay que ser cuidadosos con la regulación en este contexto», ha matizado Ribera.

Por otro lado, la titular de Transición Ecológica ha resaltado también que entre los intereses y las políticas comunitarias figura como una prioridad el incremento de las interconexiones energéticas.

El pasado viernes, el embajador de Francia en España, Jean-Michel Casa, llamó la atención a Ribera en un escrito que hizo público y en el que subrayaba que no le habían gustado «algunas maneras de expresarse» por parte de la titular de Transición Ecológica en relación con el H2Med.

En ese sentido, manifestó estar «sorprendido» porque Ribera tildase de «señales un poco extrañas» los comentarios del Gobierno galo acerca del proyecto y, en concreto, en relación a su intención de que a través del tubo fluyese hidrógeno de origen nuclear.

Desde Transición Ecológica se intentó calmar los ánimos y se aseguró que el diálogo con Francia era fluido y positivo, si bien se mantuvo firme en su postura de que el hidrógeno nuclear no es renovable.

De hecho, la embajada francesa en España, a través de cuyo perfil en la red social Twitter se divulgó el texto de Casa, borró el mensaje el sábado por la mañana.