La aerolínea Air Nostrum ha reanudado el proceso para su fusión con la irlandesa CityJet y ha vuelto a remitir a las autoridades europeas la documentación para que autorice la operación con la que ambas compañías querían crear el mayor grupo europeo de aerolíneas regionales.
Tras el parón por la pandemia de coronavirus, las negociaciones entre las dos compañías para cerrar el acuerdo «siguen su curso» ahora y la aceptación por parte de la Comisión Europea de la fusión sería «un paso más dentro del proceso de unión que las dos aerolíneas pretenden alcanzar», según han explicado fuentes de Air Nostrum.
La Dirección General de la Competencia de Comisión Europea ya validó en 2019 la unión entre los dos operadores regionales, pero ha vuelto a pedir que se formalizara el trámite de competencia al haber pasado cuatro años desde la anterior aceptación.
Así, la autoridad europea ha recibido la notificación cursada por Cityjet y Air Nostrum para que autorice la fusión entre las dos compañías.
Air Nostrum y CityJet firmaron en 2018 el acuerdo para crear un holding que dirigirían las dos aerolíneas con el objetivo de crear «el mayor grupo europeo de aerolíneas regionales», según anunciaron sus primeros ejecutivos. No obstante, la pandemia de coronavirus puso a Air Nostrum en una situación de déficit patrimonial con pérdidas de 144 millones de euros.
El pasado mes de junio, el presidente de la aerolínea valenciana, Carlos Bertomeu, ya señaló en la rueda de prensa para ofrecer los resultados de 2021 de la compañía –que logró reducir en más de un 95% sus pérdidas y recuperó sus cifras de tráfico–, que la intención era recuperar el proyecto de fusión porque, aunque «los tiempos y contextos» habían cambiado tras la crisis sanitaria, la voluntad de Air Nostrum era la misma.
De hecho, Bertomeu precisó que este plan estaba contemplado en los informes de viabilidad remitidos para acceder al préstamo participativo de 111 millones de euros concedido por la Sociedad Estatal de Préstamos Industriales (SEPI), a cargo del Fondo de Apoyo a la Solvencia de Empresas Estratégicas (FASEE).
El presidente de Air Nostrum explicó que ambas firmas debían comprobar si «la compatibilidad de encaje» entre ambas firmas seguía «intacta», debido a las deudas de Air Nostrum para mantener sus flotas, su personal y activos, y a la pérdida por parte de CityJet de estos, sin deuda. Por ello, se debían reexaminar las condiciones de la operación.