El Índice de Precios de Consumo (IPC) de Portugal ha retrocedido en diciembre al 9,6%, tres décimas menos en relación a la tasa interanual del mes anterior, según el avance publicado este viernes por el Instituto Nacional de Estadística (INE) del país luso.

Sin embargo, la evolución de la inflación subyacente, que excluye el impacto de la energía y de los alimentos frescos, se ha situado en el 7,3%, frente al 7,2% de noviembre, registrando así su mayor subida interanual desde diciembre de 1993.

Se estima que en diciembre la tasa de variación interanual de los precios de los productos energéticos se ha moderado al 20,9% desde el 24,7% del mes anterior, mientras que el índice relativo a los alimentos frescos se ha situado en el 17,6%, frente a la subida del 18,4% en noviembre. De esta manera, el INE ha estimado una subida promedio de los precios del 7,8% en los últimos doce meses.

De su lado, el Índice Armonizado de Precios de Consumo (IPCA), empleado por Eurostat en sus cálculos, ha registrado una variación interanual del 9,8%, ralentizando su subida del 10,2% en noviembre.

El dato adelantado de diciembre deberá ser confirmado por el instituto estadístico portugués el próximo 11 de enero.