Mark Zuckerberg (Nueva York, EE. UU., 40 años), fundador de Facebook y CEO de Meta, ha reforzado su estatus como uno de los mayores propietarios de superyates del mundo tras la adquisición de su tercera embarcación, el U-81. Este yate de sombra, construido en 2022 por Damen Yachting y valorado en unos 100 millones de dólares, fue previamente propiedad del multimillonario Graeme Hart. Está diseñado como un buque de apoyo, pero también funciona de forma independiente como superyate gracias a su lujoso interior, que incluye alojamiento para ocho invitados y hasta 26 tripulantes, un helipuerto, una gran grúa y una cancha de baloncesto al aire libre.
Originalmente llamado Naghi 1000, el U-81 fue concebido como plataforma utilitaria para la industria del gas antes de ser transformado en 2022 en yate de sombra para acompañar al megayate Here Comes the Sun. Damen completó esta conversión, convirtiéndolo en el yate de sombra más grande de su astillero hasta que apareció Abeona. En 2025, Hart lo puso en venta fuera del mercado, y fue Zuckerberg quien lo adquirió tras completar una última renovación en enero de ese mismo año.
El U-81 mide 80,1 metros de largo y tiene un volumen interior de casi 3.000 GT. Puede transportar numerosos equipos recreativos, sirve como base de operaciones móviles y, con todos los juguetes lanzados al mar, su cubierta se convierte en cancha de baloncesto. Si se usa como apoyo logístico, puede llevar más de 40 miembros de tripulación para asistir al megayate principal, aunque también puede funcionar como embarcación principal por sí solo, debido a su diseño de lujo.
Impulsado por motores diésel-eléctricos Caterpillar, el U-81 es rápido, fiable y elegante. Aunque no está disponible para alquiler y fue comisionado de forma privada, se sabe que combina tecnología de vanguardia con comodidad y funcionalidad.
Una cartera de superyates
Zuckerberg ya contaba con dos embarcaciones: el megayate Launchpad, de 118 metros de eslora y unos 330 millones de dólares, adquirido a inicios de 2024, y su nave de apoyo Wingman, de unos 30 millones, que complementa al Launchpad. Con la incorporación del U-81, la colección náutica del magnate tecnológico asciende a unos 430 millones de dólares, acercándose al nivel de figuras como Jeff Bezos, propietario del yate de vela más grande del mundo, Koru, y del buque de apoyo Abeona, y otros oligarcas rusos.
