La 37ª edición de la Louis Vuitton America’s Cup va calentado motores o, mejor dicho, velas. A menos de nueve meses del inicio de las regatas, los establecimientos hoteleros y apartamentos turísticos con vistas al mar están registrando las primeras reservas de lo que se espera sea un lleno absoluto (con 2,5 millones de visitantes) en septiembre y, sobre todo, en octubre del próximo año.
Esta regata es la principal competición de vela del mundo y el tercer acontecimiento con más impacto económico y mediático del planeta. Para saber cómo marchan las cosas a escala institucional, patrocinios y deportivo, Forbes Nautik habla con Grand Dalton (Auckland, Nueva Zelanda, 1957), director de la competición y del equipo defensor del título, el Emirates Team New Zealand, al acabar la regata preliminar de Jeddah (Arabia Saudí), donde su barco se alzó con la victoria.
PREGUNTA. Hace unos días se ha celebrado la segunda regata preliminar en Jeddah, en la que han logrado la victoria. ¿Qué conclusiones ha sacado?
RESPUESTA. Desde el punto de vista de las regatas, fue un espectáculo fantástico ver una competición tan reñida y disputada en los AC40. Obviamente, fue muy satisfactorio que Emirate Team New Zealand ganará la regata, pero si ese es el nivel de las regatas que veremos el año que viene en Barcelona, será una Copa América increíble.
P. Para aquellos que no saben lo que es la Copa América, ¿cómo se lo explicaría?
R. Que es el trofeo más antiguo del deporte internacional. Estamos hablando de una competición que se disputó por primera vez en 1851, y en sus 172 años de historia sólo la han ganado cuatro naciones: Estados Unidos, Australia, Nueva Zelanda y Suiza. Aunque se trata de una regata de vela, la realidad es que es una carrera de diseño, en la que el barco más rápido siempre gana y, a lo largo del tiempo, eso nunca ha cambiado. Cada equipo debe de diseñar el barco que consideré más rápido dentro de los parámetros del diseño de su clase. Como dicen en la Copa América, “No hay segundo”. Porque sólo hay un barco más rápido.
P. ¿Qué le diría al público local y nacional para que se involucre en la competición?
R. La Copa América tiene mucha profundidad. Como ya le he mencionado, es mucho más que una regata de veleros, desde el diseño y la innovación, los secretos, los regatistas y el espectáculo que se verá en Barcelona. Todo el mundo debe involucrase ya que será uno de los eventos deportivos mundiales más significativos que se disputa frente al mar en una de las ciudades más emblemáticas del mundo.
P. Según un estudio realizado por la Universidad Pompeu Fabra de Barcelona, se espera que el impacto económico de la Copa América en la ciudad sea de 1.200 millones de euros. ¿Cree que esta cifra pueda ser aún mayor?
R. Nunca se sabe. Estas previsiones se basan en un método probado y contrastado, pero siempre es difícil saber dónde se situará al final del evento, pero teniendo en cuenta la pasada edición, creo que es una buena cifra que esperemos que se supere.
P. El efecto de la Copa América en hoteles y apartamentos turísticos ya empiezan a notarse en la ciudad, en términos de ocupación los días de las regatas finales. ¿La respuesta del público está siendo esperada?
R. Creo que a escala local, nacional y global, hay una gran expectación por el evento, pero aún nos queda mucho trabajo por hacer para implicar más a la población local y concienciarla de do emocionante que será formar parte de él. Queremos revivir a través de la Copa América Barcelona el orgullo que Barcelona sintió tras los Juegos Olímpicos de 1992.
P. Usted eligió Barcelona por encima de otras candidaturas para que la Copa América se celebrara en la capital catalana. ¿Cómo están respondiendo las instituciones y empresas a la hora de implicarse y patrocinar el evento?
R. En general, nos han apoyado muchísimo. Es evidente que las instituciones se implicaron desde el principio, cuando se eligió Barcelona, al darse cuenta de la oportunidad que la prueba supone para la ciudad.
Desde el punto de vista del patrocinio, estamos muy contentos. El apoyo del sector comercial ha sido enorme y tenemos una familia muy especial de patrocinadores que están muy comprometidos.
P. ¿Puede llegar algún patrocinio relevante en las próximas semanas o meses que pueda tener gran impacto?
R. Ya casi hemos completado nuestra lista de patrocinadores, aunque en los próximos meses anunciaremos uno o dos más que nos hacen mucha ilusión.
P. ¿Qué es lo más innovador que vamos a ver en la prueba de Barcelona?
R. La innovación está en el corazón de la Copa América en todos los aspectos, desde los propios barcos de regata a la producción televisiva, pasando por el barco de apoyo propulsado por hidrógeno y liderando la innovación, que se utiliza para avanzar en la sostenibilidad de la tecnología marina. Pero en última instancia, no sabemos qué es lo más innovador que vamos a ver…¡Sin duda será, probablemente, en uno de los barcos de regata!
P. La competición contará con monocascos AC75 con foils que pueden alcanzar velocidades de hasta 100 Km por hora y hacerlos volar. ¿Cómo es la tecnología y el diseño de estos barcos para que puedan alcanzar semejantes velocidades sin que sus cascos toquen el agua?
R. Es una compleja combinación de cosas, pero los principios del foiling son los mismos, que se remontan a cuando Emirates Team New Zealand innovó para llevar el foiling a la Copa América en 2013. En esa edición, el reglamento, no preveía que los barcos foilearan. Pero como equipo innovamos para conseguir un diseño que permitiera que lo hiciesen. Indudablemente, cuando eso ocurrió, todos los competidores siguieron nuestra innovación y, en última instancia, cambió la faz de esta regata y de la vela en general. Desde entonces, el foiling y su diseño e innovación se han vuelto cada vez más sofisticados.
P. ¿Cuál es el principal problema técnico que puede tener el AC75?
R. En realidad, tiene muy buena estabilidad, pero al carecer de quilla son inestables en reposo. Son barcos difíciles para navegar bien, pero así es como debe ser, porque se trata de la cima de este deporte.
P. El Emirates Team New Zealand llego a Barcelona, en julio. ¿Cómo se están adaptando al territorio y a las aguas mediterráneas?
R. Barcelona ha sido una base fantástica para el equipo, y todos ellos han disfrutado mucho viviendo en la ciudad. En cuanto a las condiciones de navegación y regata, han sido todo lo que esperábamos y más. Lo que sí sabemos después de haber navegado en diferentes condiciones a lo largo del año es que la Copa América en Barcelona va a presentar una gran variedad de condiciones desafiantes para los competidores, por lo que será una regata espectacular.
P. ¿Cuántas personas componen su equipo en la Ciudad Condal?
R. El número de miembros del equipo puede variar en diferentes momentos de la campaña. Ahora mismo hay en Barcelona unas 150 personas en todos los departamentos: diseño, administración, equipo de tierra, construcción de barcos y navegación. Lo que mucha gente no sabe es que solo un 10% del equipo son regatistas. Así que hay una gran cantidad de talento y apoyo entre bastidores en el equipo para ganar el evento.
P. Hablando de tripulación, ¿cuántas personas integran el equipo?
R. Lo componen 14 regatistas.
Patrón y timonel: Peter Burling.
Timonel: Nathan Outteridge.
Control de vuelo: Andy Maloney- Blair Tuke.
Cyclors (ciclistas): Sam Meech- Simon van Velthooven- Dougal Allen- Louis Sinclair- Louis Crosby- Cameron Webster- Marcus Hansen- Marius van del Pol- Josh Junior-
Entrenador: Ray Davies
P. A menos de nueve meses de la regata, ¿cómo se está preparando el New Zealand para llegar en las mejores condiciones posible a la final?
R. Cualquier equipo que aspire a ganar necesita una preparación casi perfecta. Bueno, en realidad tiene que ser más impecable que el siguiente mejor equipo. Pero ahora mismo, todavía tenemos que tomar decisiones de diseño importantes en varios aspectos, nuestro barco de regatas aún esta en construcción. Hay un afán incesante por seguir mejorando y optimizando el rendimiento del barco y su velocidad, además del de la propia tripulación. Así que cada fase de la campaña es tan importante como la siguiente para estar listos en las mejores condiciones posibles para la final. Porque la regata que hay que ganar no es la primera, sino la última.
P. Dice que su barco de competición esta todavía en construcción. ¿Cuándo esperan contar con él?
R. Hay mucha gente a la que le encantaría saber cuando tendremos el barco de regatas y qué aspecto tendrá. Por ahora, mantendremos a los aficionados con la incógnita.
P. Han ganado las dos últimas ediciones de la Copa América. En Barcelona, aspira a sumar la tercera consecutiva. ¿Cómo la espera?
R. Ganamos la última en casa, en Auckland, y la anterior en Bermudas. Ningún equipo ha ganado tres veces seguidas. Obviamente, el NYYC celebró la Copa América durante 132 años como club náutico, pero en los tiempos modernos ningún equipo lo ha conseguido, así que ese es nuestro objetivo.
P. ¿Qué opina del campo de regatas de Barcelona? ¿Cree que es mejor que el de Auckland?
R. Son muy diferentes. En Auckland se corría generalmente en aguas planas muy protegidas, mientras que el de Barcelona está mucho más expuesto a las olas y al oleaje. Y, además, supone un reto mucho mayor para la navegación y el diseño de los equipos.
P. ¿A quién ve como mayor rival de los cinco barcos desafiantes?
R. A estas alturas no se sabe. Hasta que no veamos los nuevos barcos, que se irán botando progresivamente en la primera mitad del año, todo son conjeturas. Lo que sí sabemos es que esta es la alineación de dasafíos más fuerte que hemos visto en muchas ediciones. Y, para que ganemos, tendremos que estar al máximo nivel en todos los aspectos.
P. ¿Se sentiría decepcionado si no levantara la tercera Jarra de las Cien Guineas?
R. Por supuesto que sí. Competimos para ganar, y si no ganamos, habremos fallado. A menudo he dicho que la euforia de ganar es el alivio de no perder. Y no queremos perder.
P. ¿Las decisiones importantes las toma siempre usted o hay alguien de su equipo, de su entorno, a quien consulta?
R. Tenemos una estructura muy plana dentro del equipo. Obviamente, mi función es la de CEO, así que, en última instancia soy responsable de todo. Uno de los puntos fuertes del equipo es la experiencia que tenemos en todos los departamentos, y confiamos mucho en esa experiencia a la hora de tomar decisiones. Kevin Shhoebridge (el Ceo, director de operaciones) es mi mano derecha, ha participado en diez ediciones de la Copa América y su experiencia y sabiduría son fundamentales para el éxito del equipo y para muchas de las decisiones que se toman.
P. Usted es una de las mayores autoridades de la vela internacional, ya que ha dado la vuelta al mundo en siete ocasiones y tiene cientos de millas náuticas a sus espaldas. ¿Está la palabra peligro en su guion?
R. Absolutamente, como en muchos deportes, hay que equilibrar la velocidad con el riesgo.
P. Ha cumplido 66 años, lo que para muchos significa la jubilación, pero no para usted. ¿Qué le motiva para seguir navegando al máximo nivel?
R. Me encanta el ambiente de equipo, un grupo de hombres y mujeres motivados que luchan por un objetivo común. Cada campaña tiene un principio y un final, y al terminar hay un veredicto.