El gas, el agua y la electricidad representan las principales partidas de gasto doméstico para muchos hogares españoles.
Al año, el gasto medio en energía de un hogar español es de alrededor de 1.000 euros, según el IDAE (Instituto para la Diversificación y el Ahorro de Energía).
De este gasto energético, la electricidad representa una de las fuentes de mayor consumo. De hecho, el pasado mes de abril, el recibo de la luz registró la mayor subida de la historia, concretamente un 46%, tras importantes incrementos al inicio del año con la ola de frío.
El recibo de la luz cambiará a partir del próximo 1 de junio en aproximadamente 10,7 millones de hogares en España.
Será solo aplicable a aquellas viviendas acogidas a la tarifa regulada, también conocida como PVPC (Precio Voluntario para el Pequeño Consumidor). Por el contrario, no afectará a aquellos con una tarifa eléctrica de precios libres.
La factura pretende incentivar el consumo eléctrico en horas de menor demanda, como las noches y fines de semana. De esta forma se busca evitar la saturación de las infraestructuras y posibles inversiones futuras en las mismas, que el consumidor terminaría pagando. Además de potenciar la eficiencia del consumo, el ahorro energético o el despliegue del coche eléctrico.
Pero la realidad es que, si los consumidores no realizan cambios en sus hábitos a la hora de usar la luz en casa, supondrá un incremento del 10% en la factura, entre 58 y 80 euros más al año. Al aumentar el coste de la electricidad en las horas de mayor consumo y reducirse en las horas de menor gasto eléctrico.
Tres tramos, diferentes precios
Con la nueva factura, se introducirán tres tramos horarios con distintos precios. El primero es el tramo Punta –el más caro–, entre las 10:00 y las 14:00 horas y las 18:00 y 22:00 horas; el segundo el tramo Llano –precio intermedio–, comprendido entre las 8:00 y las 10:00 horas, las 14:00 y las 18:00 y las 22:00 y 24:00. Por último el tramo Valle –el más económico–, de 00:00 a 8 de la mañana y todas las horas de fines de semana y festivos nacionales.
Este coste variable determinará el 60% de los cargos en la factura y el 40% restante corresponderá a gastos fijos de peajes –ahora divididos en transporte y distribución–, alquiler de contadores e impuestos.
¿Cómo no pagar de más en la factura eléctrica con la nueva tarifa? Coincidiendo con el Día Mundial de la Luz, UCI (Unión de Créditos Inmobiliarios), da las claves para que el consumidor pueda ahorrar en la factura de la electricidad.
Consumir en los tramos más económicos
Aprovechar para hacer el mayor uso de electricidad en la franjas Valle, la más barata, y Llano. Según la OCU, realizando un 50% del consumo en horas Valle se podrían llegar a ahorrar hasta 70 euros al año.
Se trataría de cambiar los hábitos y cargar los dispositivos electrónicos y poner el lavavajillas antes de ir a dormir, después de cenar o comer y a primera hora de la mañana, para así evitar el consumo en la hora Punta, la más cara.
El uso de la lavadora y la secadora, mejor dejarlo para el fin de semana. Un buen truco es utilizar la opción de programar los electrodomésticos, en aquellos que sea posible, para su funcionamiento en estos tramos más baratos.
Revisar la potencia contratada
Muchos consumidores pagan un coste por una potencia que realmente no necesitan, por lo que es recomendable revisar la potencia contratada y fijarla en función de la necesidad real.
Para saber la potencia que cada hogar necesita, hay que tener en cuenta los electrodomésticos que más se usan. Entre los de más consumo energético: la calefacción eléctrica (1.000 – 2.000W), el horno (1.200 – 2.200W), el lavavajillas (2.200W) y la lavadora (1.500 W).
Combinar potencias
Los usuarios podrán contratar dos potencias diferentes, una para el periodo Valle y otra para el Punta y el Llano.
En los casos en los que realmente se haga un gran uso en el periodo Valle es recomendable tener establecida la potencia extra en esta franja. Y para el resto del día, la potencia habitual contratada. Esta doble potencia no es obligatoria y lo mejor es contratarla solo en caso de una necesidad mayor de potencia en horario Valle, como la carga de vehículos eléctricos.
Comportamientos responsables
Algunos pequeños trucos son fundamentales para el ahorro, como apostar por la entrada de luz natural lo máximo posible para iluminar una vivienda, no dejar las luces encendidas sin necesidad, no tener muchos puntos de luz en una estancia, usar bombillas LED que consumen menos, cargar las baterías de los dispositivos electrónicos al completo, evitar el modo stanby o no abusar de los grados de la calefacción.
Aunque es complicado cambiar de hábitos, es recomendable entender cómo será este nuevo funcionamiento en la tarifa eléctrica para que aquellos hogares a los que afecta puedan introducir cambios en sus rutinas y evitar grandes desembolsos en sus facturas eléctricas.