Actualmente puede parecer bastante difícil verse tentado por una imagen. Acostumbrados a mirarlas donde sea que nos lleve la mirada, existe la sensación de encontrarnos en un estado de anestesia en el que ninguna parece diferenciarse de la otra. Ante un sentido de la vista sobrestimulado, la pintura aperece como un posible espacio de pausa y resistencia a ese tránsito frenético.

La galería de arte VETA by Fer Francés, ubicada en el icónico barrio madrileño de Carabanchel, apuesta por esa visión y da un paso hacia la concepción de la galería de arte como un espacio de activación artística, más allá de las limitaciones del cubo blanco. Desde su fundación en 2021, han apostado por artistas que expanden las posibilidades expresivas de la pintura y que desafían la relación del espectador con la obra de arte, tales como Atanta Adebayo, Therese Chromati o Kang Haoxian

Siguiendo con esa linea, para esta ocasión han reunido la obra de tres artistas internacionales que coinciden en la elección de la pintura como principal vehículo de expresión, Abraham Lacalle, Erik Parker y Bernhard Martin. 

Desde el pasado 28 de junio y hasta el 2 de septiembre, se pueden apreciar en los muros de la ex nave industrial,  una cuidada selección de las vistas panorámicas psicodélicas de Parker en High Hopes, los paisajes vibrantes de Lacalle en Brilliant Pink, así como de las escenas oníricas de Martin en La misura dello Spirito.

Aunque las muestras están ideadas y expuestas por separado, el recorrido por las salas de la nave inevitablemente sugiere una lectura compartida. Convocar a estos tres artistas en la misma galería es también poner sus obras en conversación, es abrir paralelamente universos y visiones creativas que provocan, sugieren y tientan a los y las espectadoras.

En esta exposición, cada lienzo es la posibilidad de un mundo. La elección por parte de los artistas de géneros pictóricos tan tradicionales como el retrato, el paisaje o el bodegón, demuestran que el potencial de innovación se localiza no el qué sino en el cómo.

A través de las obras reunidas en las salas de la galería, los artistas nos proponen sus teorías y visiones sobre la pintura, que resultan tanto íntimas como evocadoras e invitan a ser completadas en nuestra pupila.

Erik Parker (Alemania, 1968)El título de la exposición, High Hopes, puede traducirse como “Grandes Esperanzas” pero también entenderse como un guiño al viaje psicodélico al que el pintor nos invita a sumergirnos. A través de los lienzos de formato circular, el artista sugiere cierta mirada ocular que asume al espectador como participe de la escena, quien se abre paso entre la maleza para encontrarse con un paisaje cuasi alienígena.

Parker nació en Stuttgart, sin embargo ha desempeñado la mayor parte de su trayectoria artística en Estados Unidos y es de la cultura popular de este país de la  que ha nutrido su vocabulario pictórico. Sus lienzos delatan la influencia gráfica de medios impresos como cómics revistas y periódicos de los años 70, así como de la contracultura hippie y el movimiento psicodélico.

Ya sea en tondos, retratos o composiciones piramidales, cada obra convoca multitud de referencias visuales que traducen fragmentos del imaginario colectivo a una paleta de siluetas improbables y colores fluorescentes que pueden ser leídos en clave de comentario satírico de realidades contemporáneas.

Este verano estrenó la exposición Easy Freedom, comisariada también por Fer Francés en el CAAC malagueño.

Abraham Lacalle (Almería, 1962)  Brilliant Pink, es el título de la exposición y es también el nombre de una de las tonalidades de rosa más presentes en la paleta de los cuadros de la muestra. No parece nada azorosa la elección del nombre de un color como eje vertebrador de la exhibición ya que es probablemente el tratamiento cromático de las formas naturales uno de los rasgos más distintivos de los paisajes de Lacalle.

Una de las obras más destacadas de la exhibición nos muestra la escena de un retrato ecuestre intencionadamente fallido. El jinete, cuya representación  tradicionalmente se asocia a la conquista del territorio, la caza y la virilidad,  en esta ocasión está fuera de escena. Es esa ausencia la que subvierte uno de los tópicos mas legendarios de la pintura y la que permite a la vez el completo protagonismo de los elementos naturales.  La obra de Lacalle contiene constantemente guiños, aunque no necesariamente de complicidad, a la historia del arte.

Los cuadros de gran formato favorecen la percepción de estos como portales abiertos en los que mientras se pasea por la sala se tiene la sensación de poder dar un paso dentro del lienzo.

Para Lacalle cada lienzo es un campo de exploración del propio lenguaje y posibilidades de la pintura, teniendo en ese sentido, un estilo tanto experimental como propio y maduro. Es actualmente uno de los artistas mas destacados de la escena artística nacional.,su Desde su primera exposición individual Un lugar donde nunca sucede nada en el Museo Reina Sofía en 2005, su obra ha pasado por numerosas exposiciones a nivel nacional e internacional.

Bernhard Martin (Alemania, 1966) Ha basado su carrera principalmente en Berlín y Londres. Sus obras han pasado por las salas de destacados museos de arte contemporáneo como el MoMA PS1 o el Museo Arario de Seúl, así como por multitud de galerías y ferias internacionales. La Misura dello Spirito 1-12, es la primera muestra individual del artista en España. Al igual que Parker y Lacalle, Martin sabe desplegar hábilmente su vocabulario pictórico en lienzos de gran formato, en los cuales el espacio se construye a partir de la yuxtaposición de escenarios oníricos que nos hacen participes  de encuentros furtivos o delirios parciales.

Sin embargo, el artista elige también discretos encuadres para presentarnos escenas más focalizadas. Es el caso de la serie de las doce pinturas realizadas  especialmente para esta exposición, donde la temática es la sobremesa de un gran banquete del que solo quedan las sobras contenidas dentro de escenarios nebulosos en los cuales se difuminan las barreras entre lo real y lo fantasioso.