En los últimos días han aparecido en Internet titulares ridículos sobre trozos del Sol que se desprenden, un vórtice aterrador y «Uh, el sol se rompe», así como afirmaciones de que todo fue captado por el telescopio espacial James Webb. Las múltiples historias también afirman que los astrónomos están atónitos.

Afortunadamente, nada de esto es cierto: ninguna parte del Sol se ha desprendido, el Telescopio espacial James Webb (JWST) nunca jamás apunta al Sol y, en consecuencia, los astrónomos no están desconcertados.

Pero en el Sol ha ocurrido algo muy interesante.

Entonces, ¿por qué una miríada de titulares engañosos?

La fuente inicial de muchas informaciones es un tuit de la astrónoma Dra. Tamitha Skov, meteoróloga espacial, del 2 de febrero. La Dra. Skov dijo:

«¡Hablando de vórtice polar! El material de una prominencia septentrional acaba de desprenderse del filamento principal y ahora circula en un enorme vórtice polar alrededor del polo norte de nuestra estrella. Las implicaciones para la comprensión de la dinámica atmosférica del Sol por encima de 55° aquí no pueden ser exageradas».

El comunicado iba acompañado de imágenes del Sol captadas por el Observatorio de Dinámica Solar de la NASA.

Como consecuencia, se produjeron muchos malentendidos, el tuit se hizo viral y aparecieron muchos titulares extraños.

Esto es lo que ocurrió realmente:

¿Qué ocurrió en el Sol?

Una «prominencia» normal en el Sol fue vista haciendo algo inusual. Una prominencia solar es un bucle de gas cargado eléctricamente llamado plasma, que a menudo brota del Sol. Es posible verlas a simple vista durante la fase de totalidad de un eclipse solar total.

Tienen este aspecto:

Un primer plano del disco del Sol durante un eclipse total revela ardientes prominencias solares. | Vista desde: la Reserva Científica de Mauna Kea. (Foto de Roger Ressmeyer/Corbis/VCG vía Getty Images) CORBIS/VCG VIA GETTY IMAGES

Ninguna parte del Sol «se desprendió» –las prominencias son sucesos cotidianos–, pero el hecho de que el filamento se arremolinara después alrededor de la región polar del Sol hace que se trate de un suceso poco frecuente.

Scott McIntosh, físico solar y subdirector del Centro Nacional de Investigación Atmosférica de Boulder (Colorado), explicó a Space.com que una prominencia como ésta se produce en la misma latitud de 55º cada 11 años.

«Este vórtice ha sido citado en muchos medios de comunicación como «un trozo del Sol se desprende», pero no hay que creerse el bombo», escribió la Dra. Skov en su blog. «¡Todo forma parte del perfectamente normal e impresionante ballet solar!».

Solar Orbiter y el ‘máximo solar’

Los científicos no saben por qué se produjo este fenómeno porque no disponen de imágenes de las regiones polares del Sol, pero pronto podrían obtener más pistas. En febrero de 2025, la nave espacial Solar Orbiter de la Agencia Espacial Europea comenzará una órbita inclinada del Sol, iniciando su misión de «alta latitud» durante la cual tomará las primeras imágenes desde arriba de las regiones polares del Sol.

Solar Orbiter tendrá un asiento de primera fila para observar el «máximo solar» del Sol, que se prevé que se produzca durante 2025. El Sol tiene un ciclo de aproximadamente 11 años durante el cual crece hasta el «máximo solar» y decrece hasta el «mínimo solar», del que forma parte esta extraña prominencia.

¿Por qué el JWST no estaba apuntando al Sol?

El JWST es el telescopio espacial más ambicioso y complejo jamás construido, con un enorme espejo primario de 6,5 metros capaz de detectar la débil luz de estrellas y galaxias lejanas.

El JWST está permanentemente alejado del Sol, por lo que dispone de un enorme y complejo escudo solar que impide que la luz solar se acerque a su óptica o la caliente ligeramente. Si el JWST apuntara al Sol, su óptica quedaría completamente destruida.

El evento fue visto en el limbo polar del Sol por el Observatorio de Dinámica Solar de la NASA, que ha estado observando el Sol desde 2010.

Les deseamos cielos despejados y ojos bien abiertos.