El pasado 8 de febrero, Penélope Cruz y Javier Bardem se convirtieron en una pieza más de la historia del galardón más relevante del cine internacional. La pareja española es el sexto matrimonio de actores que están nominados el mismo año a los premios Oscar. Ella, por su papel protagonista en la última película de Pedro Almodovar, Madres Paralelas; y él, por interpretar a Desi Arnaz en Being the Ricardos, de Aaron Sorkin.
El tándem de actores no es extraño ante este tipo de eventos. Ambos han sido nominados en varias ocasiones —nunca antes juntos— y tienen su respectivo Oscar, además de muchos otros premios de la industria. Los dos aspiraban también a un Goya en febrero. Penélope, por el mismo personaje; y Javier por su papel en El Buen Patrón, de Fernando León, que narra la historia del propietario de una empresa que aspira a ganar un premio a la excelencia empresarial.
Aunque probablemente Bardem no basase el papel de patrono que le valió un cabezón en su vida personal, el actor no es ajeno a la vida empresarial. Conocidos son los negocios que tuvo junto a su familia: un restaurante, La Bardemcilla, situado en la madrileña calle Núñez de Arce, que echo el cierre hace varios años; y una empresa de organización de eventos, Rama 1939 S.L., de la que su madre era la administradora única y cuyo último acto publicado data de 2008.
Pero más allá de las empresas familiares, su nombre aparece en otras compañías, todas ellas relacionadas con el mundo del cine y el entretenimiento. Una de ellas es Pinguin Films S.L., de la que es apoderado, socio y administrador Único, y que lleva inactiva desde al menos 2019, según Informa. La otra, Pura Ficción S.L., de la que también es administrador único, tampoco tiene indicios de actividad.
Penélope Cruz, por su parte, es administradora única de Eduenca S.L., una sociedad que tampoco parece tener actividad desde 1998, cuando presentó su último informe de cuentas.
