2025 es sinónimo de 250 años del nacimiento de Jane Austen. A pesar de que la escritora británica no era muy fan de la ciudad en la que vivió varios años, Bath celebra a una de sus hijas más ilustres con un año lleno de celebraciones y más de dos semanas señaladas de programación especial.
A tan solo tres horas de Londres, este rincón británico combina su herencia romana y victoriana con la más vibrante modernidad. Con cerca de 5.000 edificios designados como de especial interés por su valor arquitectónico, la ciudad ha sido declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.
Bath no solo es una de las ciudades más bellas arquitectónicamente del Reino Unido, sino que es cuna de aguas termales, reconocida gastronomía tradicional y literatura prácticamente en cada rincón. Precisamente, este año a su tradicional Jane Austen Festival (del 12 al 21 de septiembre) se suma un programa completo de celebraciones durante todo 2025, incluidos tours conmemorativos o actividades como el Tea with Mr Darcy en The Jane Austen Centre’s Regency Tea Room.
A continuación, todos los lugares para seguir la pista de la célebre escritora en este especial año.
Alquilar una habitación con vistas
Aunque Jane Austen nació en Steventon (Hampshire) y pasó gran parte de su infancia entre Oxford, Southampton y Reading, a principios del siglo XIX se trasladó a esta ciudad del sur de Inglaterra. La escritora vivió durante tres años (a pesar de que la placa de su fachada reza 1801-5) y comenzó a escribir su obra The Watsons en este enclave, hoy un Airbnb convertido en cuatro apartamentos al estilo georgiano original, para hacer las delicias de sus fans más acérrimos.
Luego se mudó a Green Park Building East, y de allí al actual Jane Austen Centre (en Gay Street, 25) hasta que su padre la dejó huérfana de la pensión que recibía como párroco, motivo por el pasó a depender de sus hermanos Jane y Cassandra (con poco más de 450 libras al año). La mayoría de los domicilios por los que los Austen deambularon depués no se pueden visitar (Queen’s Square nº13 y Trim Street nº7), a excepción de The Paragon (en el 1 de Roman Road), hoy unos lustrosos apartamentos a tan solo unos pasos de Milsom Street y Walcot Street.
¿Qué son los hombres comparados con las rocas y las montañas?
Uno de los spots favoritos de Austen para pasear en la ciudad era Sydney Gardens, frente a su antiguo domicilio, hoy el parque más antiguo de Bath. Aunque en su día había que pagar la entrada, la escritora estaba suscrita e iba cada día. Muchos de los decorados ya no existen, pero aun se mantiene en pie el templo de Minerva y los puentes chinos sobre el canal.
A unos pasos, el Holburne Museum alojaba salones para que las damas caminasen tranquilamente por su interior cuando llovía, tras lo que fue un hotel. Hoy este edificio alberga la primera galería de arte público de la ciudad, con señalas obras pictóricas y de artes decorativas creadas en torno a la colección de Sir William Holburne. También es posible comer en su café, con vistas a Green Park y admirar la frondosidad que enmarca la simetría georgiana del arquitecto local John Wood.
Bailar al estilo de la regencia
Según cuentan en el Jane Austen Center, el día más feliz de la escritora fue cuando se mudó de Bath al campo. Sin embargo, curiosamente Bath resultó su inspiración principal en la sosegada distancia. Así, los Assembly Rooms y Pump Room fueron los de los escenarios elegidos para sus novelas La abadía de Northanger y Persuasión. Como resultado, el mes de septiembre acoge el Festival Jane Austen durante diez días, motivo de sobra para poder asistir a un baile de máscaras real (con traje georgiano obligatorio).
Actualmente, además es posible alojarse en el B&B donde la BBC grabó la célebre adaptación televisiva de Persuasión, en Sir Walter Elliot’s House número 95 (famoso antaño por sus fiestas).
De Queen Square a Royal Crescent: la ruta de una chica de campo atrapada en la ciudad
La abadía de Northanger, la primera novela de Austen, anotó sobre su protagonista: «Llegaron a Bath. Catherine estaba completamente encantada; sus ojos estaban aquí, allí, en todas partes, mientras se acercaban a sus bellos y llamativos alrededores, y luego conducían por las calles que los dirigían al hotel. Ella había venido para ser feliz y ya se sentía feliz», recuerdan las páginas de La abadía de Northanger, la primera novela de Austen. Así lo demuestra el esplendor desde Queen Square a Gravel Walk, escenario de algunos de sus protagonistas, como los de Persuasión que se encuentran para confesarse su amor bajo la sombra de sus árboles y a la espalda de Royal Crescent, el principal monumento de la ciudad de Bath: treinta mansiones del s. XVIII con una casa-museo en su número 1, recreando la vivienda de una familia de esa zona en la época (abierta a partir de febrero).
Unos pasos más adelante, las casas georgianas de Gay Street, frente sus jardines privados que exhiben su máximo esplendor en verano. Sobre su colina, John Wood diseñó un edificio de viviendas pareadas con forma de media luna emulando la monumentalidad romana (tan típica de este movimiento durante el siglo XVIII). Hoy este lugar, coronado por el hotel Royal Crescent, también sirve de decorado para ficciones que se sitúan coetáneas con las de Austen, como la televisiva Los Bridgerton.
Hacer resurgir las letras entre las aguas de la ciudad
Parte del misticismo de la ciudad reside en sus termas, cuya estructura data del una construcción de entre el siglo I y III. De hecho, el hermano de Austen vino a tratar aquí sus problemas de gota, sumergiéndose en varias piscinas de este complejo antes de irse al bar.
Hoy este complejo (que se utilizó como moderno spa hasta los años 70) alberga el museo, donde es posible seguir del camino de las aguas, su proceso geotérmico y la eclosión final a 46 grados de temperatura a través de sus fallas de la piedra. Sin embargo, í que es posible bañarse en el Thermae Bath Spa, una construcción contemporánea ampliada sobre la estructura original que cuenta con equipamiento recursos de máximo confort (tres pisos de tratamientos, baños de vapor, sauna, jacuzzi y dos piscinas, una de ellas en la terraza con vistas a la ciudad).
«No quiero tomar otra cosa que no sea té…”
Bath es el paraíso del Afternoon tea, una de las predilecciones de Jane Austen, que la familia tomaba atípicamente sobre seis y media de la tarde. En su caso, gastaban la marca Twinings, siendo Jane era la encargada de prepararlo (y custodiarlo bajo llave debido a su coste).
Además, y como en cualquiera de los salones de té de la ciudad, el suyo consistía en un plato de té servido con English muffins, un clásico brioche inglés al que se suma el Bath Bun como alternativa loca. De hecho, existe un perenne entre Devon y Cornualles sobre la forma correcta de comerse este bollo; mientras que los primeros untan el pan primero con crema de nata y luego con mermelada de fresa en Cornwall lo hacen curiosamente a la inversa.
En la ciudad también se puede probar el Devonshire style, en el antiquísimo salón Pump Room Restaurant y al ritmo del piano que algunos miembros de la familia Austen disfrutaban; tanto es así que, cuando el salón se inauguró, todavía no se habían descubierto las termas romanas que hay debajo. Para todo lo demás (desde especialidades inglesas de comida o cena hasta sus famosos Sally Lunn Bunn rellenos), Sally Lunn es probablemente el lugar más icónico de la ciudad.
Leer, beber y dejar pasar las horas
En la librería George Bayntun, especializada primeras ediciones de los clásicos de la literatura inglesa, también celebran su propio homenaje a la autora. No solo tienen varios tipos de ediciones de todas sus novelas disponibles (Mansfield Park, Lady Susan, Emma…) sino que además entre sus paredes conservan uno los pocos talleres de encuadernación victorianos aun en pie en el Reino Unido. Todo se hace a mano y la tercer generación opera con tanta meticulosidad como cuando se fundó en 1894.
De entre todos los bares de la ciudad, Canary Gin Bar tiene una carta de cócteles inspirados en el mundo Jane Austen (y perfectos para fans de Orgullo y Prejuicio, tales como el Lizzy B o el Darcy), mientras que en el ArtBar (en Abbey Hotel) destaca su combinado inspirado en La abadía de Northganger: el Northangover Abbey.