La «ciudad inteligente» más grande que se haya creado desde en Europa está en pleno proceso de construcción. Pero, peso a lo que podría pensarse, no está en Londres, París o cualquiera de los otros grandes destinos de nuestro continente. Esta ciudad totalmente sostenible se sitúa a tan solo 20 minutos de la capital griega, Atenas, en la zona de costa conocida como Riviera Ateniense.
Para muchos es la “ciudad de los 15 minutos”, en referencia al hecho de que va a ser posible acceder a cualquier punto de este complejo en no más de 15 minutos. Este proyecto de uso mixto acogerá algunos hitos como el más alto rascacielos de Grecia, un importante centro comercial y de ocio y el parque costero más grande del continente, que duplicará con creces la cantidad de espacios verdes de la capital. Se estima que supondrá casi el 2,5% del PIB griego, ya que atraerá a un millón de visitantes internacionales al año y 14.000 millones de euros en ingresos adicionales en cuanto esté finalizado.
The Ellinikon, el nombre de este proyecto, está gestionado por Lamda Development y se está construyendo en lo que una vez fue el aeropuerto internacional de la ciudad, que se trasladó en el año 2001. Su pista original se convertirá en un parque y su terminal, diseñada por Eero Saarinen, se remodelará para convertirse en un espacio para albergar desde exposiciones a reuniones profesionales y sociales. La empresa Lamda está detrás de los centros comerciales más lujosos y glamourosos del país, y The Ellinikon albergará en el futuro The Riviera Galleria, con más de 300 tiendas, restaurantes y lugares de ocio.
El director ejecutivo del proyecto, Odysseus Athanassiou, explica cómo avanza esta idea que comenzó en 2013 y se inaugurará en 2026. Para cuando esta nueva ciudad de 2.490 hectáreas esté totalmente terminada, en 2037, habrá generado 80.000 puestos de trabajo y más de 10.000 millones de euros en ingresos al país.
Ahora que ya se ha vendido por completo la Riviera Tower (el edificio más alto de Grecia y su primer rascacielos residencial), la atención se centra en Little Athens, un proyecto residencial compuesto por cinco complejos con viviendas de hasta cinco dormitorios. Varios de los edificios contarán también con locales comerciales y restaurantes en la planta baja.
RQ: el proyecto se inició hace una década, ¿cómo está evolucionado?
OA: es como una ciudad entera con servicios residenciales, de restauración, educativos y comerciales, como los que se encontrarían en una ciudad tradicional, salvo que ésta es totalmente sostenible. La gente irá en bicicleta, a pie (todo está a 15 minutos) o en transporte público en lugar de en coche, aunque todas las residencias cuentan con aparcamiento. La extensa red de metro de la ciudad se extiende hasta esta zona, lo que facilita el desplazamiento y son necesarios solo ocho minutos para llegar al centro.
También hay una extensa playa, que está abierta al público, un parque urbano (parte del cual se sitúa sobre la pista del antiguo aeropuerto), espacios culturales y un centro para personas con discapacidades. Los turistas podrán escanear un código QR para seguir un recorrido cultural autoguiado por los monumentos y lugares relevantes dentro del parque, como iglesias antiguas y un enterramiento histórico. El puerto deportivo, que forma parte de este proyecto, albergó el centro de vela durante los últimos eventos deportivos de categoría internacional celebrados en Atenas.
La Riviera Tower ofrece vistas increíbles del mar y las montañas que rodean la zona. Está completamente vendida, pero Little Athens, otra serie de edificios residenciales, todavía tiene disponibilidad y está generando un gran interés. Al final, habrá más de 8.000 viviendas conformando el complejo.
Otras partes del proyecto son un casino, un paseo marítimo y varios hoteles. El objetivo es crear algo «para el futuro», es decir, algo que pueda estar en consonancia con las tendencias ambientales y comerciales para los próximos años. Con el tiempo, habrá espacio para que más de 25.000 personas vivan y trabajen aquí. Hacia 2026, los residentes empezarán a mudarse a sus nuevos hogares.
El parque albergará más de 31.000 árboles de 86 especies diferentes, con más de un millón de plantas mediterráneas. Muchos de los árboles se cultivan en un vivero cercano antes de trasladarlos al proyecto, aportando una frondosa vegetación y sombra a los residentes y visitantes. El objetivo es que el parque sea completamente neutro en carbono en las próximas cuatro décadas. Será uno de los parques costeros más grandes del mundo y más del doble del tamaño de Hyde Park en Londres. Esto también duplicará la cantidad de espacio verde para los atenienses.
RQ: ¿Qué otros hoteles están previstos en el proyecto?
OA: habrá más, pero aún no se han anunciado. Mandarin Oriental abrirá en 2027 y tendrá sus propias residencias de marca. Hard Rock tendrá más de 1.000 habitaciones y un importante centro de convenciones y eventos. Estos hoteles acogerán a los numerosos visitantes que llegan al complejo, impulsados en parte por el centro comercial y de ocio Vouliagmenis, que se espera que sea el más grande del país en su categoría.
RQ: ¿Quién es el cliente principal de estos proyectos inmobiliarios?
OA: el 95% de los residentes que ya han adquirido propiedades son griegos (tanto residentes como de la numerosa diáspora). El resto de los inversores incluye a personas de Estados Unidos, Reino Unido, Australia y Oriente Medio. Las ventas de propiedades ascienden a más de 600 millones de euros y se espera que esa cifra aumente.
Una tendencia interesante del proyecto es que forma parte de la “recuperación de talentos” de Grecia. Las predicciones son que The Ellinikon tendrá un impacto económico de más 13.000 millones de dólares en el país cuando esté en pleno funcionamiento.
Este tipo de proyectos pueden transformar una ciudad. Lo hemos visto en lugares como Bilbao, donde el Museo Guggenheim transformó radicalmente los planes turístocos de la ciudad. Lo mismo ocurrió en Singapur con la apertura de Marina Bay Sands, que atrajo un gran interés (sobre todo a través de las redes sociales).
En 2023, las llegadas de turistas a Grecia alcanzaron un nuevo récord, con un 18% respecto al año anterior, y 32,7 millones de viajeros. Y se esperan resultados similares para 2024.
RQ: ¿Cuáles son los principales atractivos del proyecto?
OA: en primer lugar, The Ellinikon ha recurrido a algunas de las firmas de arquitectura más importantes del mundo para ofrecer una calidad y un diseño a la altura de las mejores ciudades. Entre ellas se encuentran Foster+Partners, Sasaki (que creó todo el plan maestro para el desarrollo) y Kengo Kuma.
El año que viene se abrirá al público el parque deportivo con campos de fútbol, piscinas y pistas de tenis. Y como parte del concepto de «ciudad de 15 minutos», la playa está, caminando, a no más de ese tiempo desde cualquier parte del complejo.
RQ: ¿En qué consiste una ciudad inteligente?
OA: la sostenibilidad es clave para este proyecto. Habrá un software especial que controle los desechos, el uso de energía y el gasto de agua. Gran parte de las aguas residuales se utilizarán para regar las zonas verdes que rodean las construcciones. Los jardines de lluvia se utilizan para la gestión de las aguas pluviales. Riviera Tower ya cuenta con la precertificación LEED Gold y su exterior biofílico está diseñado para ser respetuoso con el medio ambiente y reducir el consumo de energía.
RQ: ¿Qué pasa con las iglesias y los edificios históricos existentes?
OA: hay nueve edificios protegidos y catalogados como históricos en cuyo mantenimiento hemos invertido. Incluida una iglesia que permanece abierta durante el proyecto de construcción y los tres hangares originales para aviones, que ahora se utilizan como parte del “parque de experiencias” para los visitantes, con casi dos docenas de exposiciones digitales y tecnológicas.
RQ: ¿Por qué la conexión con lo que fue el aeropuerto es un elemento clave del proyecto?
OA: para los griegos, la terminal del aeropuerto representa el lugar donde la gente daba la bienvenida y también se despedía de sus seres queridos. Muchas personas tienen una conexión emocional con este lugar. También fue parte de una de las rutas de llegada más famosas del mundo durante décadas (similar a Hong Kong), con aviones que sobrevolaban los edificios antes de aterrizar en las pistas, en plena capital.
RQ: ¿Cuáles son los planes para el histórico Boeing 747 estacionado aquí?
OA: esperamos convertirlo en un centro de visitantes o una experiencia en la que la gente pueda ver cómo era un 747 y experimentar las sensaciones propias de lo que fue el antiguo aeropuerto.
Este tema es un extracto del publicado en Forbes.com. Para leer el original solo hay que pinchar aquí.