La compañía aérea británica easyJet acaba de inaugurar su nuevo centro de control integrado, que está junto al aeropuerto de Lutton, situado a unos 55 kilómetros del centro de Londres. Un nuevo espacio en el que trabajan unas 250 personas, cuya principal misión es velar por la gestión y seguridad tanto de los 340 aviones de la compañía como de los pasajeros y tripulantes y resto de personal de la aerolínea.

En su tarea los trabajadores del nuevo centro de control de easyJet cuentan con una gran ayuda: la de la IA (Inteligencia Artificial), fundamental para la toma de decisiones durante situaciones críticas. Y es que, tal y como informa el diario económico Expansión, en temporada alta a través de este centro se pueden operar unos 1.950 movimientos de aviones por día, transportando a unos 300.000 pasajeros a través de unas 1.000 rutas que alcanzan 35 países diferentes.

Control de las operaciones por IA

Desde el control de Lutton, por ejemplo, easyJet gestiona el diseño de las tripulaciones, el hecho de que los aviones estén en el lugar correcto para el buen funcionamiento de las operaciones, su mantenimiento y posibles necesidades de reparación, el análisis de la meteorología y el impacto que ésta pueda tener con las rutas planificadas para los vuelos.

Para todo ello ayudan los modelos de Inteligencia Artificial aplicada a las necesidades de la compañía, que también interviene en el análisis de la demanda de pasajeros. Esto facilita, por ejemplo, asignar los aviones con mayor capacidad (como el A321, con capacidad para 235 pasajeros) a las rutas más concurridas. Según la propia compañía y de acuerdo con la información de Expansión, gracias a esta nueva tecnología se podrían gestionar un millón de plazas más al año.