Cuando la colombiana Verónica Durán Castelló (Colombia, 52 años) vio por primera vez un mantón de Manila en una boda madrileña, supo que había encontrado su obsesión. Dos décadas después, su colección personal la convierte en la mayor coleccionista de mantones de Manila en España.
Esa colección se podrá ver este lunes en la galería Gonzalo Eguiguren Gallery, donde se podrá ver «Las Artes del Galeón de Manila: Seda, laca y enconchado«, una exposición que reúne más de cuarenta piezas maestras para narrar la primera globalización cultural: aquella que, entre los siglos XVI y XIX, conectó Asia, América y Europa a través del legendario comercio transpacífico.
Una viaje desde Oriente hasta Iberoamérica
El proyecto se adentra en la circulación de objetos y símbolos entre Oriente y el mundo iberoamericano. Desde lacas japonesas y textiles chinos hasta barnices de Pasto, enconchados novohispanos o mantones de Manila bordados en Cantón, la muestra revela cómo las artes asiáticas fueron absorbidas y reinterpretadas en talleres virreinales. Una Santa Bárbara de Bartolomé de Arenas (ca. 1670) y la Virgen con el Niño atribuida a Giovanni Nicolao —pintada en Macao para uso jesuita— ilustran ese viaje intercultural de ida y vuelta.
El programa se completa con una charla inaugural el 29 de septiembre en la que participarán especialistas internacionales como Adrián Contreras-Guerrero (Colombia, especialista en lacas novohispanas y escultura virreinal), Ana Zabía de la Mata (España, conservadora de museos especializada en arte virreinal) y Yayoi Kawamura (Japón, historiadora del arte especialista en la laca urushi y sus redes de exportación), además de Verónica Durán.
Mantones de Manila: una historia de elegancia
Periodista y descendiente de una de las familias más influyentes de Colombia (su bisabuelo Alfonso López Pumarejo fue dos veces presidente del país), Verónica Durán llegó a Madrid en el año 2000 con un sueño: coleccionar los mantones de Manila. Tras trabajar en medios como El Tiempo o la agencia EFE, orientó su carrera hacia la investigación cultural. Su fascinación por los mantones de Manila nació en una boda madrileña, al ver aquella prenda sobre los hombros de una invitada, “la mujer más elegante que había visto jamás”, como recuerda.
Desde entonces ha reunido una colección única de 47 piezas y ha escrito el libro La ruta del mantón de Manila. Entre anécdotas de su vida, cuenta con orgullo que logró entrevistar a figuras tan inalcanzables como el Dalai Lama, Gorbachov, Arafat o incluso Muamar el Gadafi, antes de consagrarse por completo a visibilizar la historia y la importancia de esta prenda que une Asia, América Latina y España.
Las Artes del Galeón de Manila: Seda, laca y enconchado podrá visitarse hasta el 14 de octubre en la sede de la galería, en la Calle Justiniano, 3 (Madrid). Una oportunidad única para explorar cómo los objetos viajaron, se resignificaron y siguen tejiendo historias de identidad global siglos después de haber surcado el Pacífico.
