Este fin de semana, los nombres de dos mujeres dominaron titulares y redes sociales generando un debate viral: Abby y Roro, protagonistas de uno de los combates más polémicos y comentados de «La Velada del Año V», el macroevento de boxeo y entretenimiento organizado por Ibai Llanos (Bilbao, 30 años). Las creadoras de contenido se enfrentaron en el ring instalado en el estadio de La Cartuja (Sevilla), ante 80.000 personas y con más de 9 millones de espectadores siguiéndolo en directo a través de Twitch, una plataforma digital de emisiones en directo.
Lo que comenzó como un enfrentamiento deportivo entre influencers, derivó rápidamente en un debate mucho más profundo sobre feminismo, exposición digital, estándares físicos y presión mediática.
¿Quiénes son Abby y Roro, las mujeres más virales del fin de semana?
Abby, el nombre artístico de Abril Gené Capriles (Palma de Mallorca, 24 años), es una streamer del universo gamer con una audiencia consolidada en Twich, TikTok y YouTube. Saltó a la fama tras ganar el concurso «El Último en pie», organizado también por Ibai en Twitch. Pero su presencia digital no está exenta de controversia. Su mudanza a Andorra, una práctica común entre los streamers españoles para beneficiarse de un régimen fiscal más favorable que el español, le supuso muchas críticas. Más en su caso, ya que suele tener un discurso progresista y combativo.
Por su parte, Roro, Rocío López Bueno (Madrid, 23 años), es una creadora de contenido que se viralizó en TikTok gracias a sus vídeos cocinando a su pareja, Pablo. Con más de 9 millones de seguidores, su contenido ha sido etiquetado por algunos como parte del movimiento tradwife, es decir, mujeres que promueven un estilo de vida basado en el papel tradicional de las mujeres en el hogar. Precisamente esto fue lo que encendió la mecha de la polémica entre ambas.
Un combate fuera del ring
El conflico entre Abby y Roro no comenzó en el ring, sino mucho antes. Hace ya unos meses, Abby criticó abiertamente los vídeos de Roro, acusándola de representar una imagen de mujer basada en estereotipos de género tradicionales. “No me parece feminista”, señaló en redes sociales, encendiendo así un debate masivo sobre qué significa serlo hoy.
“Soy feminista, nunca voy a hundir a una mujer y menos a insultarla”, defendió así Roro su estilo de vida como una elección libre, reafirmando que la autodeterminación también forma parte del feminismo. Este enfrentamiento convirtió el combate en un verdadero «duelo ideológico».
Además, en los días previos al evento, se hicieron virales las declaraciones de Abby al hablar en tono burlón sobre la estatura de Roro: «Está al borde del enanismo», dijo en referencia a sus 1,50m frente a los 1,72m de Abby. La diferencia de altura y peso avivó un nuevo debate sobre la equidad del combate. La streamer tuvo que bajar a 57kg y Roro subir a 54kg, en un proceso que ambas describieron como muy exigente física y mentalmente.
Victoria entre abucheos
Tras la tan esperada pelea, Abby fue declarada ganadora por decisión del jurado profesional. Sin embargo, los abucheos del público resonaron con fuerza. Muchos espectadores cuestionaron la imparcialidad del resultado, solidarizándose con Roro, quien pese a sufrir una lesión durante el evento, aguantó hasta el final.
En un entorno donde millones de personas observan y opinan en tiempo real, ambas quedaron expuestas a un juicio constante. Mientras el público abucheaba el resultado del combate, fueron precisamente Abby y Roro quienes dieron una lección de compañerismo y respeto, reconociendo el esfuerzo de la otra. Abby cerró la pelea afirmando que “solo veía a dos ganadoras”.
El negocio detrás del espectáculo: millones en juego
La Velada del Año V no solo fue un fenómeno cultural y mediático —en el que Ibai Llanos batió récords de audiencia y engagement en el mundo del streaming—, también fue un evento de alto impacto económico.
Como ocurre con todo evento multitudinario de esta magnitud, la repercusión económica no se limita a los ingresos directos que recibe el organizador. Sevilla se vio beneficiada por la llegada masiva de prensa, equipos técnicos, creadores de contenido y fans de todo el mundo, lo que muy probablemente generó un impacto importante en sectores como el turismo, la hostelería y el comercio local.
En cuanto a las cifras del propio evento, aunque no existen datos oficiales publicados por Ibai Llanos o su equipo, la plataforma fiscal TaxDown ha elaborado una estimación aproximada de lo que pudo haber costado —y recaudado— La Velada del Año V.
Según sus cálculos, la inversión total habría superado los 7 millones de euros. Solo la producción técnica del evento se estima en más de 5 millones, a lo que se suman los cachés de artistas internacionales —como Aitana, Melendi, Myke Towers o De la Rose—, peleadores, montaje, campaña de marketing y todo el personal implicado detrás del espectáculo.
En cuanto a ingresos, la venta de entradas habría generado unos 6 millones de euros. Si a esto se le añaden los ingresos por publicidad, patrocinios, suscripciones y monetización en Twitch, la recaudación total podría haber superado los 10 millones. Esto supondría un beneficio neto de unos 3 millones.
A falta de confirmaciones oficiales, lo que sí está claro es que La Velada se ha consolidado como uno de los eventos más rentables y mediáticos del panorama digital europeo.
