De Warren Buffett a Elon Musk: así invierten su dinero los grandes multimillonarios
Los grandes capitales no dan puntadas sin hilo. Nadie quiere perder la gran fortuna que tanto les ha costado construir. La referencia de las inversiones acometidas desde Warren Buffett, pasando por Elon Musk o Bill Gates, son relevantes en el plano de la configuración estratégica de muchas carteras.
Los movimientos de las fortunas más altas siempre son un espejo en el que mirarse, aunque el contexto en algunos momentos no sea especialmente halagüeño. 2020 fue un año terrible para muchos, con el Covid-19 exponiendo los fallos en los sistemas de salud, políticos y económicos del mundo. Sin embargo, a pesar de todo este trauma y los confinamientos, los más ricos ganaron más dinero que nunca.
Los grandes peces gordos de la tecnología como Jeff Bezos, Bill Gates, Mark Zuckerberg, Elon Musk, junto con Bernard Arnault, llegaron a sumar de forma colectiva 230.000 millones de dólares a su riqueza total, que ahora se ubica en alrededor sobre los 700.000 millones, según los datos de Forbes.
Sorprendentemente, su ascenso incluso eliminó a Warren Buffett de la lista de los cinco primeros por primera vez desde que comenzó el índice en 2012. Por tanto, ¿qué podemos aprender de ellos como inversores minoristas? Es importante conocer qué movimientos han hecho durante los últimos tiempos.
Elon Musk y Jeff Bezos: la estrategia de reinvertir
La carrera por ser el dominador en la lista de las grandes fortunas no se gesta por inercia. Tiene que ver, y mucho, con las inversiones que se han realizado. En este caso, la disputa entre Jeff Bezos, con un patrimonio neto total de unos 187.000 millones de dólares, y Elon Musk, que acumula una fortuna de unos 167.000 millones de dólares, tiene relación directa con sus carteras particulares.
El fundador de Amazon, el minorista de comercio electrónico más grande del mundo, superó al cofundador de Microsoft, Bill Gates, para convertirse en la persona más rica del planeta en 2020.
Bezos posee alrededor del 11% de las acciones de Amazon, según una presentación de la SEC de noviembre de 2020. Tenía en su haber el 15% de la compañía antes de que se transfiriera una participación del 4% a MacKenzie Bezos, en 2019, después de consumar el divorcio de su pareja, lo que resultó en la pérdida de 36.000 millones en acciones que fueron parar a su exmujer.
Sin embargo, los eventos de 2020 hicieron de la pérdida del ejercicio anterior se quedaran olvidadas. Amazon se disparó en bolsa un 70% y es por eso que gran parte de su riqueza provino del descomunal rally alcista de la compañía con sede en Seattle.
Charlie Aitken, fundador y director ejecutivo de Aitken Investment Management, escribió recientemente un informe en el que señalaba que Amazon continuaría beneficiándose de la reasignación de los patrones de gasto de los consumidores, particularmente en Estados Unidos.
El enfoque de Bezos se ha basado siempre en reinvertir beneficios y, además de sus acciones de Amazon, que representan más del 40% de su cartera, también apuesta por negocios como Ever, Unity, Airbnb, Uber, Google, GA, o Domo.
Una aproximación parecida a la de Elon Musk, cuyo interés en las reinversiones siempre ha sido palpable. El CEO de Tesla y de la empresa de transporte espacial SpaceX, fue el héroe indiscutible de la generación de dinero del 2020.
En mayo, SpaceX se convirtió en la primera empresa privada en enviar astronautas a la Estación Espacial Internacional. Pero Tesla es la verdadera razón de la fenomenal aceleración de la riqueza de Musk, pues el precio de las acciones de la compañía se multiplicó por siete en 2020 y ahora cotiza dentro del índice S&P 500.
Dentro de sus apuestas se pueden encontrar valores como PayPal, Sika, Modine Manufacturing, o criptomonedas que ha recomendado en los últimos tiempos como Bitcoin o Dogecoin.
La diversificación sectorial de Bill Gates, Bernard Arnault, Mark Zuckerberg y Warren Buffett
Bill Gates cayó a la tercera posición en la lista global de ricos en 2020, ya que su enfoque más diversificado para invertir tuvo una rentabilidad inferior al aumento estelar de valores como Amazon y Tesla. Aun así, ganó 18.000 millones de dólares, lo cual no es, para nada un mal resultado.
El enfoque del Gates se centra en apuestas del sector salud, Big Tech, biotecnología, y farmacéuticas. La mayor parte de su fortuna se deriva de Cascade Investment, una sociedad que se creó con las ganancias de las ventas de acciones de Microsoft y los dividendos. Algunas de sus otras más notables inversiones son Berkshire Hathaway, Waste Management, Caterpillar, Canadian National Railway, o Walmart.
Por su parte, Bernard Arnault, presidente de LVMH, focaliza su estrategia en el sector del lujo, en el comercio minorista, y en la liquidez. Es la persona más rica de Europa gracias a sus participaciones en los principales minoristas, y posee alrededor del 45% de Louis Vuitton Moet Hennessey.
Frente a la pandemia, LVMH ha demostrado ser mucho más resistente de lo esperado; sus acciones cotizan sobre los máximos históricos a pesar de haber sufrido un gran golpe durante la crisis de marzo.
Arnaud también posee el 97,5% de Christian Dior, la casa de moda de lujo, el 8,6% de Hermes International (Euronext Paris: RMS), otro minorista francés, o el 1,9% de Carrefour.
Mientras, Mark Zuckerberg, presidente y CEO de Facebook opta por el sector de la educación, de la tecnología, y la liquidez como estrategia para invertir.
Facebook tenía 2,74 mil millones de usuarios activos mensuales en septiembre de 2020, un aumento del 12% interanual. Con todo, las nubes están pesando sobre las perspectivas de la red social dado que los reguladores de Estados Unidos están presionando para que se disuelva la empresa.
Zuckerberg tiene alrededor de 2.800 millones de dólares en liquidez. Sus intereses, al igual que los de su organización benéfica, giran en torno a las áreas de educación y tecnología. Ha invertido en empresas como Panorama Education, Vicarious, Mastery Connect y Asana.
Por último, Warren Buffett presidente y CEO de Berkshire Hathaway, es uno de los adalides del value investing. Es decir, la búsqueda de gangas que están infravaloradas por el mercado con una clara diversificación. En su cartera prevalecen compañías como Wells Fargo, Coca-Cola, American Express, IBM, Procter&Gamble, Apple, o Exxon Mobil.
