Primero, plasmó una realidad que inquietaba a la empresa: la gente pedía su gaseosa en los restaurantes, y no la había. Después, dio la vuelta al concepto: sí que la había, lo que daba pie a situaciones desternillantes.
Primero, plasmó una realidad que inquietaba a la empresa: la gente pedía su gaseosa en los restaurantes, y no la había. Después, dio la vuelta al concepto: sí que la había, lo que daba pie a situaciones desternillantes.