Hace un año, se informó que unos 24,5 mil kilogramos de diamantes habían sido extraídos de diferentes minas de Australia, Congo, Botswana, Sudáfrica y Rusia. Además, el diamante se estima que tiene una reserva mundial de unos 600 millones de quilates, con Australia a la cabeza. Aunque no sea un monopolio, hay tres empresas que cuentan con el 60% de las explotaciones totales; Alcorzas, de Rusia; De Beers, de Luxemburgo y Rio Tinto, mitad británica y mitad australiana.
Como dato curioso, los diamantes a diferencia de otros minerales, no tienen un precio fijo en el mercado. Por ejemplo, en 2015, los diamantes que se extrajeron tuvieron un valor de producción de 15.000 millones de dólares, total que aumentó 23 mil millones después de ser pulidos, pero, ni los años anteriores ni los siguientes seguirán el mismo varemo.
Aunque comience a notarse la tendencia hacia los diamantes sintéticos, según estadísticas de The Engagement Ring Bible, la población británica gasta en este tipo de anillos 2.000 libras de media, necesitan tres meses para la elección del anillo correcto y es uno de los gastos más importantes de una boda, por delante de la ceremonia y la luna de miel.
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