En muchas empresas persiste la idea equivocada de que integrar una herramienta informática es suficiente para la digitalización. Sin embargo, una verdadera transformación digital requiere de un análisis previo de toda la organización y gestionar el cambio en todo el equipo.
Luigi Amendola y Tibaire Depool, de la consultora PMM Innovation Group, refuerzan esta idea y la importancia de tener una hoja de ruta, que comience con el diagnóstico del nivel de madurez digital de la organización y que defina las acciones concretas y un calendario para su implantación.
En este sentido, han desarrollado Digital Transformation Maturity Model (DTM2), una herramienta para evaluar el grado de madurez que tiene una organización respecto a la transformación digital y para definir una hoja de ruta, acciones o proyectos que deben desarrollar para la digitalización en la gestión de sus activos.
En España, menos del 20% de las pymes están totalmente digitalizadas y un 80% correspondiente a autónomos y microempresas, no lo están. Esto puede ser un problema a la hora de competir a nivel local y al buscar la internacionalización. Como solución, el (DTM2) se enfoca en el ciclo de vida del negocio, los activos y sus procesos asociados a la toma de decisión de CAPEX y OPEX y abarca siete dimensiones: estrategia digital, organización digital, tecnología digital, cultura digital, procesos digitales, innovación y digitalización sostenible.
Una herramienta que indica en qué áreas y cuándo invertir, con solo pulsar un botón.