Mandla compartió con nuestros oyentes que él es discapacitado, usa una silla de ruedas vieja que necesita ser mantenida, vive en una choza y no tiene acceso a agua corriente y electricidad. Añadió que no tiene a nadie que cuide de él y que a menudo pasa semanas sin poder bañarse.
Mientras estaba en el aire, el miembro del Comité Ejecutivo (MEC) de Vivienda en Gauteng llamó al programa diciendo que estaba preocupado por la situación y quería proporcionar asistencia al anciano. Además de esto, el MEC acordó una exclusión exclusiva de los medios de comunicación de la zona en la que vivía Mandla, para inspeccionar las condiciones de vida de la comunidad y organizar la necesaria actualización.
Unos momentos más tarde, el concejal local en el área donde Mandla vive llamó y dijo que le proporcionaría víveres para él y los haría entregar a su choza. Mientras que eso estaba sucediendo, uno de los oyentes regulares llamó y también quiso ayudar. Se comprometió a contratar y pagar una enfermera para cuidar de Mandla. Mencionó que no es rico ni está en una posición de poder, pero tiene los medios para ayudar pagando a la enfermera. Una semana después, el locutor y productor del programa siguió en contacto con las diferentes partes para comprobar si habían entregado lo que prometieron.
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Tras esta historia, Khumalo reflexionó y llegó a la conclusión de que el liderazgo responsable no tiene título, ni grupo de edad y tiene muy poco que ver con si es o no un funcionario electo o CEO de una empresa. El liderazgo responsable es nuestra capacidad de actuar y de desempeñar activamente nuestro papel las comunidades. El liderazgo responsable, en muchos aspectos, es reconocer que el liderazgo es un verbo y no exclusivo de las personas en el poder.
Podemos crear una sociedad más inclusiva, en primer lugar desmantelando esta idea de que sólo los hombres en el poder, o personas de cierta edad, o peor, un cierto género, son líderes. A menudo se nos enseña desde una edad temprana que el “liderazgo” es un rasgo masculino. Esto incapacita a las jóvenes, que crecen para ser mujeres, que no se apropien de su potencial de liderazgo.
Así, Khumalo ha co-fundado el Centro Juvenil de la Fundación Thabo Mbeki, una organización de liderazgo que es un vehículo para los jóvenes que son, o quieren estar, involucrados en dejar un legado positivo en África. Para él, el liderazgo responsable significa asumir la responsabilidad de papel en la construcción de la sociedad en la que queremos vivir y, sobre todo, es reconocer que se puede hacer más, si trabajamos juntos como un colectivo, en lugar de solos.
Hoy en día, Mandla tiene el apoyo que no tenía hace unos meses. Eso sucedió porque todos jugaron un papel colectivo en hacer que sucediera, algo que se puede hacer desde un nivel de municipio hasta un nivel global. Eso es lo que significa ser un líder responsable.