La línea Code 11.59 by Audemars Piguet mantiene casi intactos el celofán y el lazo, pues nació en 2019, y eso es antes de ayer en términos relojeros. Si bien emergió con una cantidad poco frecuente de propuestas, en cuanto a complicaciones y versiones (hasta 13), aún le quedan muchas “primeras veces”. Ésta es una de ellas: la colección incorpora en primicia un modelo automático esqueletado con tourbillon volante, lo que ha supuesto el estreno del Calibre 2980 desarrollado en la manufactura Audemars Piguet, que sustituye a su predecesor de cuerda manual y es una evolución del 2972 que se presentó en 2022 en un Royal Oak.
En 2020, Audemars Piguet desveló un ejemplar de esta colección con un cronógrafo automático y un tourbillon volante, y el nuevo ha tomado de él algunas ideas prestadas. La primera, su construcción calada, que permite una buena vista del movimiento por detrás, gracias al cristal de zafiro, y por delante, incluido el tourbillon, alojado en una jaula giratoria que completa una vuelta por minuto para compensar los efectos de la gravedad en la precisión del reloj. Al ser volante y carecer del puente superior de sujeción, queda aún más expuesto.

La segunda idea adaptada es el diseño bicolor, tan propio del Code 11.59, que esta vez combina la caja de cerámica negra de 41 mm de diámetro y 11,8 mm de grosor con el oro rosa del bisel, las asas, los puentes, el rotor y las agujas, cubiertas con material luminiscente para leer la hora incluso de noche.
La esqueletización se puede considerar como una complicación más aunque sin funcionalidad, porque la dificultad de su ejecución es elevada. Audemars Piguet la aplica a sus relojes desde 1930, y ahora emplea para ello un mecanizado de control numérico (CNC) primero y un mecanizado por descarga eléctrica (EDM) después. Con precisión, se va eliminando todo el material posible de la platina y de los puentes para dejar pasar la luz y mostrar solo lo esencial del movimiento.

El Calibre 2980, ensamblado con 278 componentes, tiene un volante que oscila a una frecuencia de 3 Hz (21.600 alternancias/hora), y ofrece una reserva de marcha de 65 horas. Cada uno de sus elementos captura la luz desde diferentes ángulos. Además, las superficies con acabado satinado y pulido crean un juego de luces y sombras.
El nuevo Code 11.59 Tourbillon Volante Automático Esqueletizado llega con una correa de caucho negro con acabado textil y un interior de piel de becerro. Su cierre desplegable de tres piezas en oro rosa garantiza un ajuste seguro. Y su precio asciende a 260.600 euros.
