Los graduados de la generación de 2025 se enfrentan a un mercado laboral difícil, ya que los empleadores están ralentizando sus planes de contratación. Si bien los expertos culpan a todo, desde la incertidumbre económica hasta el auge de la IA, no cabe duda de que los jóvenes graduados se enfrentan a una «crisis de empleo», según el Wall Street Journal.
Los reclutadores dicen que aún hay puestos disponibles, pero con más personas compitiendo por menos vacantes, los responsables de contratación son más selectivos y prolongan el proceso. Así que, si consigues una codiciada entrevista de trabajo presencial, debes tomar medidas para ser diferente, destacar y destacar entre la competencia.
Si quieres ser el candidato que ningún empleador pueda rechazar, tendrás que estar dispuesto a desempeñarte lo mejor posible cuando haya mucho en juego y la presión esté presente.
La buena noticia es que puedes llegar al momento si entrenas como los atletas de alto rendimiento se preparan para los grandes partidos. No solo estudian planes de juego. Simulan la realidad.
El entrenamiento de exposición al estrés genera confianza
Los psicólogos cognitivos denominan entrenamiento de exposición al estrés (SET) un método probado para ayudar a las personas a desempeñarse bajo presión. Consiste en exponer a las personas a niveles elevados de estrés durante la práctica.
Aunque la exposición al estrés se utiliza habitualmente para entrenar a atletas, pilotos, militares y agentes del orden, es una excelente estrategia para aliviar la ansiedad y generar confianza para presentaciones y entrevistas de trabajo. El objetivo es simular las condiciones del mundo real durante la práctica.
No confundas práctica con preparación. Prepararse para una entrevista de trabajo consiste en investigar la empresa, el puesto y lo que busca. La preparación también incluye identificar posibles preguntas y desarrollar las respuestas más contundentes.
Sin embargo, una vez que te hayas preparado, será momento de practicar de la manera correcta.
Paso 1. Siéntate en una silla firme (no un sofá cómodo) y cuenta tu historia en voz alta.
Recita las respuestas que has creado para posibles preguntas. Antes de una entrevista de trabajo, la mayoría de la gente piensa en lo que va a decir, pero al abrir la boca no suena tan bien como en su cabeza.
Es como jugar al golf. En mi cabeza, soy Tiger Woods… hasta que me subo al tee.
¿Cómo suenan tus respuestas al pasarlas de tu cabeza a tu boca? Solo hay una manera de descubrirlo: en voz alta.
Paso 2. Sube el nivel de estrés. Un poco.
Empieza a añadir un poco de presión a tus sesiones de práctica. Una forma de aumentar un poco los nervios es usar tu teléfono para grabar tus respuestas en video. Al ver la grabación, probablemente detectarás algunos problemas fáciles de solucionar. Por ejemplo, puede que estés usando demasiadas muletillas como «eh», «eh» o «¿sabes?».
Demasiadas muletillas pueden convertirse en una distracción molesta y disminuir tu capacidad para mostrarte competente y seguro. Detecta estas palabras a tiempo.
Paso 3. Pídele a un amigo que haga el papel de entrevistador.
Aumenta la presión pidiéndole a un amigo o compañero que haga el papel de entrevistador. Dale las preguntas que esperas que te hagan en la entrevista real. Pídele a tu amigo que mezcle las preguntas cada vez y que te interrumpa de vez en cuando.
Dale permiso a tu amigo para que te desafíe y haga la entrevista lo más impredecible posible.
Paso 4. Practicar cómo enfrentar bolas curvas.
Pídele a tu amigo que te haga preguntas difíciles, sobre todo las que prefieres evitar. Por ejemplo, «Cuéntame más sobre la brecha en tu experiencia laboral» o «¿Puedes explicar esta mala evaluación de desempeño en tu historial?».
Incluso si conoces las preguntas difíciles que podrían surgir, tu mente y tu cuerpo reaccionarán como si estuvieran amenazados. Acostúmbrate a mantener la calma.
Aunque recomendaría que practiques durante al menos diez sesiones, algunos estudios demuestran que solo entre cuatro y siete sesiones de práctica exhaustivas y de alta calidad pueden aumentar significativamente tu confianza y aliviar tu ansiedad.
Refleja las condiciones del mundo real en la práctica y tu cuerpo, tu voz y tu mente estarán listos para brillar cuando llegue el momento de actuar de verdad.
