La historia, la tradición y el futuro de Mazda e Hiroshima están estrechamente conectados. En Mazda tienen incluso un nombre para ello: el espíritu de Mukainada, el distrito del sudeste de la ciudad en el que Jujiro Matsuda fundó la empresa hace cien años bajo el nombre de Toyo Cork Co., Ltd.
Mukainada se encontraba unos kilómetros alejado del lugar en donde impactó la bomba, protegido por el monte Hijiyama, por ello, los daños a los edificios no fueron tan graves como en la mayor parte del resto de la ciudad, aunque, por supuesto, también sufrió grandes pérdidas. Sin embargo, se impuso inmediatamente la responsabilidad de ayudar a los primeros auxilios y a la reconstrucción a largo plazo. Apenas cuatro meses después del ataque, todo estaba listo para reanudar la producción de su vehículo de tres ruedas, el Mazda-Go.
Los años 60 se motorizan
El motor es el corazón de un coche. Cualquier fabricante aspira a construir un motor refinado, potente, eficiente y rebosante de carácter, pero para llegar hasta él hay muchos senderos que se bifurcan. Con el motor rotativo, Mazda eligió un camino solo para valientes y lanzó el primer automóvil motorizado del mundo en 1967.
Compacto, ligero y con potencia, con una cilindrada pequeña pero una curva de par suave, capaz de desarrollar altas revoluciones y al mismo tiempo duradero, y con un sonido atractivo pero sin vibraciones. Así era el motor del Mazda 787B que cruzó en primera posición la línea de meta de Le Mans, dejando en los 230.000 espectadores un recuerdo imborrable del rugido electrizando del furioso motor de cuatro rotores. Mazda se convertía en la primera marca japonesa en ganar la prestigiosa competición.
Innovación por bandera
A lo largo de los últimos cien años, Mazda ha sido un fabricante de automóviles pionero continuo de las nuevas tecnologías, dejando algunas de ellas una huella fundamental en el ADN de la empresa y en su futuro.
En 2012, lanza la nueva generación de modelos con Diseño KODO, cuyo objetivo es plasmar en la carrocería de un coche toda la emoción y la esencia del movimiento. Esta visión del diseño fue introducida por vez primera en el concept Mazda Shinari, presentado en 2010. Los modelos Mazda RX‑Vision y Vision Coupe fueron galardonados con los premios ‘Most Beautiful Concept Car of the Year’ en 2015 y 2017, respectivamente. Y, a partir de la última generación del Mazda3, se ha incorporado a los modelos de producción una interpretación más evolucionada de este diseño.
Los ingenieros de Mazda decidieron apostar por la búsqueda de la máxima eficiencia en la combustión interna a través de una cilindrada correcta y la relación de compresión más alta del mercado (la más baja en diésel) que consiguen unas excelentes cifras de consumo en condiciones de conducción real, a la vez que logró ser la primera marca en conseguir el cumplimiento de la normativa Euro 6.
Asimismo, Mazda se convierte en pionera en lo que denomina Estrategia del gramo, que consiste en reducir el peso de todos los componentes de los vehículos con el objetivo de aumentar su eficiencia y mejorar su comportamiento dinámico.
Mazda MX-5, un icono descapotable
Un biplaza ligero y descapotable con un motor alegre y tracción trasera. Cada impulso del conductor se traduce en movimiento de forma directa, precisa e instantánea. Resulta casi imposible no sonreír cuando conduces un coche así por una carretera secundaria llena de curvas. En la cultura japonesa existe un término para esa sensación: Jinba Ittai, el concepto tradicional de fusión entre el jinete y su montura que Mazda ha convertido en su seña de identidad. La manifestación más pura de este concepto es el deportivo Mazda MX-5.
Lo que comenzó como una pequeña rebelión de un fabricante japonés de automóviles se ha convertido en un icono inconfundible de la marca Mazda. Hablamos de cuatro generaciones de MX-5 y más de un millón de unidades que han hecho sonreír a conductores por todo el planeta. Este modelo tiene su origen en 1979, una época en la que el deportivo clásico era poco más que una especie en peligro de extinción. Ahora que Mazda cumple su primer centenario, la cuarta entrega del MX-5 sigue despertando la misma felicidad que sus tres predecesores.
2019, un año de récord en España
De las veinte firmas más vendidas en España, Mazda se posiciona como la marca que más ha crecido en 2019. La compañía ha registrado el mejor año de su historia en volumen de ventas a nivel nacional, alcanzando las 23.160 unidades en el ejercicio, lo que supone un crecimiento del 8,4% con respecto al año anterior y 13 puntos más que el mercado, que experimentó una caída del 4,8%. También ha sido un año de récord de cuota de mercado para la firma de Hiroshima, que ha alcanzado un 1,8%. La marca se consolida así con un crecimiento sostenido del 403% en el periodo 2012-2019.
En 2020 Mazda continúa su camino independiente de innovación, depurando su diseño y con una personalidad fiel a sus orígenes. Con Skyactiv-X ha vuelto a revolucionar la combustión, siendo el primer motor de gasolina que alterna entre la bujía y la compresión, utilizando un alto porcentaje de aire, logrando unas emisiones y consumos increíblemente reducidos. A ello se suma su amplio abanico de tecnologías para cada tipo de cliente, como su sistema Mazda M Hybrid presente en todos los nuevos motores gasolina de la marca. Y este año lanza además su eléctrico Mazda MX-30, un modelo ligero, de diseño sostenible y conducción genuina, lleno de guiños al pasado de la marca. Y es que, 100 años de historia no son tantos cuando tienes un brillante futuro por delante.