Según el informe trimestral de la European Travel Commission (ETC), el sector turístico en Europa experimenta una sólida recuperación en los primeros meses de 2024 (hasta el 31 de marzo). Así lo desvelan los datos de llegada de visitantes extranjeros (+7,2%) y las pernoctaciones (+6,5%), que en este periodo superaron las cifras de 2019.
De esta forma, se constata la continuidad de la tendencia al alza observada en 2023, cuando se registraron cifras de visitas de extranjeros y de noches de, respectivamente, un 1,2% y un 0,2% por debajo del nivel prepandemia.
Este año, la recuperación turística está impulsada en gran medida por los fuertes viajes intrarregionales de Alemania, Francia, Italia y Países Bajos. A ello se une la demanda de Estados Unidos, que sigue siendo el mercado emisor de larga distancia más importante de Europa.
Para el presidente del ETC, Miguel Sanz, las primeras cifras para 2024 revelan unas perspectivas «positivas» para el turismo europeo este año: «el gasto de los consumidores en viajes aumentará notablemente en toda Europa, alcanzando cifras récord en los próximos meses».
Aún así, Sanz ha lamentado que los elevados precios y los riesgos geopolíticos sigan siendo «obstáculos clave» para el turismo, destacando que el sector se esfuerza también por «adoptar prácticas más responsables en beneficio de la población local y para preservar el medio ambiente».
Los datos por regiones europeas
No obstante, el estudio apunta que la recuperación es constante pero desigual entre regiones y mercados emisores, siendo los destinos del sur de Europa los líderes en términos de número de visitantes internacionales en comparación con los niveles de 2019. Destacan Serbia (+47%), Bulgaria (+39%), Turquía (+35%), Malta (+35%), Portugal (+17%) y España (+14%).
Además, los países nórdicos también están experimentando un aumento de la actividad turística, ya que las pernoctaciones crecieron por encima de los niveles anteriores a la pandemia. Este aumento es especialmente evidente en Noruega (+18%), Suecia (+12%) y Dinamarca (+9%), debido en parte al turismo de deportes de invierno y a las personas que llegan en búsqueda de auroras borales.
Mientras tanto, los países de la región de los Balcanes siguen rezagados debido a los desafíos causados por la guerra en Ucrania, con Letonia registrando las llegadas internacionales postpandemia más bajas (-34%), seguida de Estonia (-15%) y Lituania (-14%).
Sobre los mercados de larga distancia, los datos de ETC muestran un comportamiento desigual de los mercados emisores. En este contexto, Estados Unidos y Canadá siguen dominando, reflejando las tendencias de 2023.
Durante el primer trimestre del año también se registró un aumento de los viajeros procedentes de América Latina, en particular de Brasil. Por el contrario, aunque Asia-Pacífico muestra signos de mejora en comparación con el periodo pasado, la recuperación sigue siendo modesta y desigual. Asimismo, los viajeros chinos empiezan a regresar a Europa, mientras que la recuperación de Japón sigue siendo lenta.
Previsiones de gasto en 2024
Las presiones inflacionistas y las incertidumbres geopolíticas siguen preocupando mucho al sector turístico europeo, aunque los datos de consumo también muestran que los viajes siguen siendo una prioridad en 2024. En esta línea, la previsión es que los viajeros gastarán 742.800 millones de euros en Europa este año, un 14,3% más que en 2023, lo que se atribuye tanto a la inflación como a la evolución de las preferencias de viaje, con viajeros que optan potencialmente por estancias más largas o experiencias más diversas.
Asimismo, la guerra en Ucrania sigue afectando a los flujos turísticos, sobre todo en Europa Central y Oriental, mientras que la guerra entre Israel y Hamás afecta ahora significativamente a los viajes de Israel a Europa, con un descenso de las llegadas israelíes del 54% respecto al año pasado en el primer trimestre en todos los destinos declarados.
Para los profesionales del sector turístico, los costes de alojamiento (59%), los costes empresariales (52%) y la escasez de personal (52%) se consideran los mayores retos.