El banco central de Guatemala ha vuelto a optar, de forma unánime, por mantener congelados los tipos de interés en el 5%, siendo esta la séptima ocasión consecutiva en la que toma esta decisión.
Así lo ha hecho tras su última reunión de política monetaria, en la que se ha tenido en cuenta la continuada reducción de la inflación en el país, que se espera que mantenga una trayectoria dentro de la meta en 2024.
Al cierre de febrero, el Índice de Precios al Consumidor (IPC) de Guatemala cayó más de cinco décimas respecto al mes anterior, hasta situarse en el 3,3% interanual, frente al 3,82% registrado en enero, según cifras del Instituto Nacional de Estadística (INE) de Guatemala.
Ante esta positiva evolución, fruto del efecto de las acciones de política monetaria y de la disipación de las presiones de inflación de origen externo registradas en meses previos, el banco ha valorado como «consistente» mantener en el 5% la tasa de política monetaria.
La entidad ha reafirmado su compromiso de seguir adoptando las medidas que sean necesarias para que los niveles de inflación permanezcan dentro de la meta.
En este sentido, ha apuntado que continuará dando seguimiento cercano a la evolución de los principales indicadores económicos, tanto externos como internos, que puedan afectar el nivel general de precios y, por ende, las expectativas de inflación.