Jeff Bezos, el fundador del gigante electrónico Amazon anunció a principios de noviembre su marcha de Seattle para mudarse a Miami, concretamente a Indian Creek, el bunker para multimillonarios que se construyó en las costas de la ciudad. Alí comparte vecindario con otros superfamosos y ricos como él, como Ivanka Trump, Carl Icahn o Jared Kushner. “Quiero estar cerca de mis padres, y Lauren [Sánchez, su pareja] y yo amamos Miami”, escribió el jueves en una publicación en las redes sociales sobre su regreso a The Magic City, donde asistió a la escuela secundaria Miami Palmetto High y donde ahora viven sus padres. Bezos, quien también fundó y financia la empresa de cohetes Blue Origin, mencionó que se están trasladando más operaciones de la compañía aeroespacial a Cabo Cañaveral, en el centro de Florida. «Por muy emocionante que sea la mudanza, es una decisión emotiva para mí», dijo Bezos en su publicación.
En la mudanza parece que solo habría muebles y objetos personales de Bezos, pero, en las últimas horas, se ha podido saber que también podría haber algo de Amazon. Según informa Bloomberg, Amazon, quien aún mantiene su sede central en Seattle, donde Bezos comenzó a desarrollar su empresa de venta de libros en un garaje, estudia la posibilidad de abrir nuevas oficinas en Miami. Esta decisión habría sido tomado días antes de que la tercera persona más rica del mundo, según Forbes, anunciara su regreso a Florida.
De momento, se desconoce si es un movimiento para dejar la sede central o si solamente se trata de una ampliación de oficinas para que Bezos pueda seguir trabajando en su empresa, ya que sigue siendo director ejecutivo a pesar de entregar las riendas de Amazon a Andy Jessy en 2021.
Una isla favorable de impuestos
Indian Creek fue construida para que multimillonarios como Jeff Bezos pudieran estar alejados de las grandes urbes y descansar frente a la bahía. Aunque también es muy favorable en temas de impuestos. En las últimas dos décadas, el número de miembros de la lista Forbes 400 con residencia principal en el Estado del Sol se ha duplicado a 46. Con el movimiento de Bezos, ese total aumentará a 47.
Su nueva casa es una finca de 7 dormitorios y 14 baños con vista a la bahía por un lado y a un campo de golf por el otro (su mansión de al lado tiene otros tres dormitorios y tres baños). Ambas casas son la última de varias adquisiciones de propiedades de ultralujo por parte de Bezos, quien también compró Warner Estate de nueve hectáreas en Beverly Hills por 165 millones de dólares en 2020. También posee casas en Washington DC, Manhattan y Maui. Las dos propiedades de Bezos en el área de Seattle, que compró en 2010, aún no parecen estar en el mercado.