La deuda de los negocios de Donald Trump rondan los 1.300 millones de euros aproximadamente, 200 millones más que cuando estaba en el cargo. Igualmente, ahora no está sometido a más presión fiscal, sino que el balance se encuentra en mejor estado que hace meses.
La razón es que JPMorgan ayudó con 1.200 millones de euros aproximadamente para un complejo de oficinas en San Francisco (California), de las que el empresario multimillonario tiene una participación del 30%.
En caso de incumplimiento, Donald Trump no sería responsable directamente, aunque tendría un gran efecto en sus finanzas. Gracias a este préstamo, Trump y Vornado Realty Trust podían pagar su deuda anterior contra el edificio. Esta vencía el mes pasado y, así, extrajeron 616 millones de euros aproximadamente en efectivo. Es decir, si Trump recibió el 30% del retiro de efectivo, el acuerdo habría aumentado sus tenencias líquidas de 110 millones a casi 300 millones de euros aproximadamente.
En 2022, el empresario vence otro préstamo valorado en 100 millones de euros, aunque este lo puede volver a refinanciar. Esta vez si se trata de una propiedad entera suya: el espacio comercial dentro de la Torre Trump. Esta propiedad tiene un valor aproximado de 275 millones de euros, por lo que un banco debería ofrecer 100 millones de euros en su contra. Incluso si el expresidente no puede encontrar una empresa para refinanciar la Torre de Trump, debería poder devolver el dinero con sus propios fondos.
La línea del tiempo
La deuda de Trump se estima que venza dentro de tres años. También tiene una deuda de un rascacielos de Nueva York llamado 1290 Avenue of the Americas. En este, al igual que las oficinas de San Francisco, es propietario en un 30%. Vornado posee, por su parte, un 70%, así que si Vornado también refinancia ese edificio, Trump podría extraer fácilmente otros 75 millones de euros.
Esto le daría al expresidente un respiro de cara a 2023, cuando tenga dos préstamos con un capital original combinado de 125 millones de euros aproximadamente, que vencen contra Trump Doral, un resort de golf en Miami. Esa propiedad ha tenido problemas recientemente, por lo que no será fácil refinanciarla. Lo mismo ocurre con los hoteles de Trump en Washington DC y Chicago, que tienen una deuda estimada de 215 millones de euros de Deutsche Bank que vence en 2024.