Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, la Plaza del Duomo es – con permiso del Ponte Vecchio -, el punto más simbólico de la ciudad de Florencia. Cada día miles de turistas acuden en peregrinación hasta ella para admirar la obra cumbre del Renacimiento italiano: una catedral imponente diseñada por Arnolfo di Cambio, el campanile de Giotto di Bondone y, sobre todo, la joya de la corona en forma de cúpula firmada por Filippo Brunelleschi.
En enero de este mismo año la ciudad florentina aprobó una nueva legislación con el objeto de promover la gastronomía típica de la zona de la Toscana con productos tradicionales italianos, en un intento de frenar la cruzada implacable de las cadenas de comida rápida. Tan solo seis meses después, en junio, McDonald’s solicitó al ayuntamiento la apertura de uno de sus restaurantes en la famosa plaza. En julio recibieron la respuesta: solicitud denegada.
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En un intento casi desesperado por lograr el local en este punto privilegiado de la ciudad, la compañía estadounidense ofreció la alternativa de modificar excepcionalmente la filosofía de sus establecimientos para adaptarse a la nueva normativa. Así, aseguró que la hamburguesería de la Plaza del Duomo contaría con una decoración más trabajada, servicio de camareros, un menú con el cincuenta por ciento de productos típicos de la Toscana e incluso una librería e n su interior. Respuesta: solicitud denegada de nuevo.
Ante la doble negativa, McDonald’s ha optado por la vía legal, y reclama 18 millones de euros al ayuntamiento de la ciudad en concepto de daños y perjuicios por la negativa reiterada a la apertura de su local. El consejero delegado de la cadena en Italia, Roberto Masi, ha asegurado que harán “todo lo posible” para “abrir nuestro mejor restaurante del mundo en la plaza de la catedral”.
El alcalde de Florencia, Dario Nardella, ha justificado su decisión en la necesidad de proteger la identidad histórica y cultural de la ciudad. En sus declaraciones ha querido hacer hincapié en que no se trata de un problema con McDonald’s en particular, compañía que ya cuenta con numerosos locales en otras partes de la ciudad, y que también ha negado la apertura de establecimientos a otras dos cadenas de comida rápida.